San Pedro Sula. – Han transcurrieron 35 años repletos de amor incondicional, alegrías, retos como pareja, algunas veces silencios, pero, sobre todo, mucha comprensión y respeto. Mario y Lidabel Sánchez de Mena han festejado tan grato acontecimiento con familiares y amigos.
Una historia que inició el 3 de diciembre 1988, cuando Mario y Lidabel, unieron sus vidas en matrimonio en la Primera Iglesia Bautista con la bendición del Pastor Rafael Castillo, quien a la vez reafirmó sus botos matrimoniales cuando cumplieron sus “bodas de plata”, 25 años de casados.
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Y ahora nuevamente el aniversario 35 de su matrimonio, el Pastor Rafael Castillo les ha dado su bendición, donde no podían faltar sus hermosas hijas: Scarleth, Grethel, Heidy y Alexa Mena Sánchez.
También el Pastor Otoniel Calderón Valiente, quien viajo con su familia desde El Salvador para Predicar en la ceremonia, instaba a la congregación a reflexionar en la cita bíblica de Eclesiastés 4:9-12, donde dice que es mejor dos que uno, porque tiene mejor paga y si uno se cayere el uno levantara a su compañero y cordón de tres dobleces no se rompe pronto haciendo referencia a Dios y ellos 2.
Durante la ceremonia María Luisa de Betancourt tuvo una hermosa participación con el canto “Oh tu fidelidad”, después de la renovación de votos, Mario hacia Lidabel con sus invitados, se trasladaron al salón contiguo de la iglesia donde estaba dispuesto la recepción con un catering preparado por Casa Cristela By Martha y Sandra Briceño, el que fue decorado en tonos Coral, ivory y peach, por la firma familiar Acontecimientos, combinando rosas, lisiantus, campanas de Irlanda y hortensias, el pastel tres tortas fue creación Maritzas Bakery especialmente para la ocasión.
