Fueron muchos los musulmanes -algunos de ellos niños y adolescentes- que han expresado sus temores al presidente de Estados Unidos
Tras el atentado de San Bernardino (California) y el discurso de algunos políticos republicanos como Donald Trump que quiere prohibir la entrada temporal a los refugiados que profesan el Islam y tenerlos bajo vigilancia, son muchos los musulmanes -algunos de ellos niños y adolescentes- que han expresado sus temores al presidente de Estados Unidos, Barack Obama.Unos lo han hecho por carta, otros en actos públicos y un nutrido grupo se lo hizo saber este miércoles durante su visita a la mezquita de la Sociedad Islámica de Baltimore (Maryland), cuyas instalaciones incluyen un colegio de primaria y secundaria. A la futura médico que le presentó y los otros jóvenes que estaban entre el público, el presidente les recordó: “Encajáis aquí. Sois parte de América”. Ninguno debe elegir, prosiguió, entre ser musulmán o americano; sois musulmanes americanos.
Obama dijo ser consciente de que “es tiempo de inquietud y miedos” en las comunidades musulmanas. Trataba de explicar el porqué de su primera visita a una mezquita en suelo estadounidense, antes lo hizo en Malasia y Egipto durante visitas oficiales, en este momento. Como americanos, apuntó Obama, todos temen la amenaza del terrorismo. Pero “como musulmanes americanos tenéis otra preocupación: que vuestra comunidad entera os señale u os culpe por los actos violentos de unos pocos” .La comunidad musulmana en Estados Unidos es pequeña (de varios millones, según el presidente) por lo que la inmensa mayoría de los ciudadanos no conocen directamente a nadie que profese el Islam. El retrato que tienen de ellos y del Islam en muchas ocasiones, explicó Obama, es el que “aparece en las noticias después de un acto terrorista”. También el que dibujan los personajes de la televisión y el cine, y que a veces es distorsionado.
En este contexto, el presidente quiso resaltar los extraordinarios musulmanes que ha conocido y la increíble labor que realizan en todos los terrenos, desde la educación al medioambiente pasando por la medicina y el deporte. En este campo, Obama quiso destacar la presencia de Ibtihaj Muhammad en la sala, que representará al equipo olímpico de EEUU en Río de Janeiro en 2016 en esgrima. “Le he pedido que venga con el oro”, dijo entre risas y aplausos de la audiencia. En varias ocasione el presidente se refirió a la “única familia americana” que constituye la nación. Y no dudo en desempolvar los libros de historia para recordar que el “Islam ha sido siempre parte de América”. Entre sus primera citas, eligió a Thomas Jefferson. Obama subrayó que el Estatuto de Virginia sobre libertad religiosa que redactó el padre fundador de la Constitución americana ya estaba destinado “a proteger todas las creencias.
En su larga visita a la Sociedad Islámica de Baltimore, Obama aprovechó para dar las gracias a los miembros de la congregación y, por extensión a todos los musulmanes. “Gracias por servir a la comunidad […] y ayudarnos a mantenernos unidos como una familia americana”, dijo entre aplausos.