Little Island se erige sobre 132 pilares de hormigón de diferentes alturas que dotan al parque de una topografía ondulada.
El parque Little Island, que ‘flota’ sobre el río Hudson y está conectado con Manhattan en Nueva York (EE.UU.) mediante dos puentes, abrió sus puertas al público el pasado 21 de mayo.
La edificación se eleva cuatro metros sobre el río apoyada sobre 132 pilares de hormigón con forma parecida de tulipanes y diferentes alturas, lo que dota al parque de una topografía ondulada. El parque que ocupa una hectárea ha sido concebido y financiado por el magnate estadounidense Barry Diller. Su construcción se ha prolongado por espacio de siete años.
Little Island consta de 350 especies de flores, árboles y arbustos repartidos entre colinas y explanadas verdes, desde las que se puede disfrutar de “deslumbrantes” vistas de la ciudad. El parque tiene un anfiteatro con capacidad para unas 700 personas, una plaza central con un escenario más pequeño y abundante espacio verde.
“Espero que Little Island sirva como un oasis de fantasía para todos los que lo visitan, un lugar para pasear y ser felizmente sorprendido en cada esquina, para descansar y disfrutar del paisaje, y para entretenerse, educar y estimular con nuestra programación”, señaló Diller.