En Honduras la desocupación laboral o personas que no tienen ingresos, presenta un alza de dos puntos al pasar de 5 a 7 por ciento, según datos al cierre del año anterior, informó hoy el Instituto Nacional de Estadísticas (INE).
Según el organismo, el paro que se mide con la Tasa de Desempleo Abierto (TDA) que en junio de 2014 arrojó que la cantidad de personas era del 5.3 por ciento del total de la Población Económicamente Activa (PEA) No obstante, el director del INE, Ramón Espinoza, reveló ayer que el desempleo presentó un incremento considerable en el 2015; “la cifra se nos subió un poco y es alrededor del 7 por ciento”.
En números absolutos son cerca de 350,000 personas desempleadas y el incremento estaría relacionado a la sequía que ha venido experimentando el país en los últimos años por la presencia del fenómeno de “El Niño”. Porque “eso hace que la gente pierda ingresos. Igual ha habido un decrecimiento económico en algunas zonas del país, todo derivado del combate a la criminalidad. Cayó un banco (Continental) y todo un grupo de empresas”, refirió.
“Todo eso ha afectado y subió a un 7 por ciento”, reiteró. Sin embargo, explicó que “en el tema de la pobreza los programas sociales han compensado. Eso hace que en los últimos tres años la pobreza total haya descendido 6 por ciento”, contrastó Espinoza. Considera que el desempleo no es el “gran problema” del mercado laboral hondureño, pues el principal viene a ser el subempleo que también presenta un repunte de cuatro puntos.
Los estudios del ente, muestran que el desempleo es más alto en las zonas urbanas, en parte, por la migración constante de personas del campo a la ciudad y la poca capacidad del mercado laboral para absorber la fuerza de trabajo. El desempleo es constante en las ciudades del país donde ronda el 7.5 por ciento y 2.7 por ciento en las zonas del interior. El Distrito Central tiene la mayor tasa de desempleo con más del 7.9 por ciento, reflejan las estadísticas de paro laboral.
De acuerdo a expertos, el fondo del problema laboral en el país, es la poca productividad de la población, ya que el promedio educativo es de primaria, mientras que en los demás países del área supera el catorceavo año de escolaridad. En tanto que la falta de ingresos y la pobreza caminan de la mano junto a los 8.5 millones de hondureños, máxime entre los más de cinco millones que conforman la PEA en Honduras.
Según el INE la población pobre “anda en 66 por ciento”, las cifras anteriores coinciden con las de otros organismos como la Comisión Económica para América Latina (Cepal) que en su último informe pronostica en retroceso del país en combate a la pobreza extrema.
