El Órgano belga de Coordinación para el Análisis de la Amenaza (OCAM) alertó este martes en rueda de prensa de la probable llegada a Bélgica y otros países de Europa de nuevos combatientes enviados por el grupo yihadista Estado Islámico (EI).
El OCAM no dio detalles sobre el número o la identidad de los combatientes yihadistas que podrían haber viajado hacia Bélgica y otros países de Europa, aunque su máximo responsable, Paul Van Tigchelt, apuntó a “señales” que indican que varios miembros del EI han sido enviados por la organización, informó la Agencia Belga.
El yihadista más joven
La Policía belga investiga también si uno de los combatientes que podría haber regresado es Younes Abaaoud, de 15 años y hermano del coordinador de los atentados de París, el fallecido Abdelhamid Abaaoud, según la cadena de televisión RTL.
El menor de los Abaaoud viajó a Siria junto a su hermano a espaldas de sus padres cuando tenía 13 años, y fue presentado entonces como el yihadista más joven del mundo.
Respecto al posible retorno de Younes Abaaoud, el responsable del OCAM no dio información “para no poner en peligro la investigación en curso”, aunque declaró que “es evidente que el joven se ha ido o ha muerto en Siria”.
Por su parte, el director ejecutivo del Centro de Crisis de Bélgica, Alain Lefevre, declaró a los medios que se han reforzado las medidas de seguridad en Bruselas tras un análisis llevado a cabo el pasado 15 de abril.
En concreto, Lefevre explicó que estas medidas se reforzarán en “sitios estratégicos”, como los aeropuertos, las estaciones de tren, metro, tranvía y autobús y las centrales nucleares; y también en lugares con un alto tránsito de personas, como centros comerciales o teatros.
Sobre las llamadas que el centro de crisis recibió durante el día de los atentados terroristas del pasado 22 de marzo, Lefevre advirtió que las informaciones respecto a la cronología de los acontecimientos “se mantienen dentro de la investigación”.
“Necesitamos recopilar, verificar, analizar, evaluar y luego decidir las acciones a tomar en cada caso, no hay automatismos”, explicó el responsable del Centro de Crisis. Lefevre puso de ejemplo “la gran cantidad de información contradictoria” que recibió su organismo tras el ataque en la estación de metro de Maelbeek.