El actor británico Alan Rickman, un especialista en papeles de malvado que apareció en las películas de Harry Potter, murió a los 69 años de un cáncer, informó este jueves su familia. “El actor y director Alan Rickman murió de cáncer a los 69 años. Estaba rodeado de su familia y amigos”, informó su familia en un comunicado.
Rickman encarnó al profesor Severus Snape en las películas de la saga de Harry Potter, pero antes saltó a la fama con su papel del villano Hans Gruber, que se enfrentaba a Bruce Willis en “Duro de matar” o “La jungla de cristal”. Además, fue el presidente irlandés Eamon de Valera en “Michael Collins” y el marido infiel de Emma Thompson en “Love Actually”.
Rickman nació en Londres el 21 de febrero de 1946 y se formó, y trabajó, como diseñador gráfico, pero a los 26 años decidió estudiar como actor en la prestigiosa RADA (Royal Academy of Dramatic Art), por donde han pasado grandes actores británicos como Peter O’Toole, Richard Attenborough o Kenneth Brannagh.
A lo largo de su carrera, actuó en más de 40 películas y un sinfín de obras teatrales, y ganó un Globo de Oro, por su papel en la miniserie de televisión “Rasputín”, y un premio BAFTA, el Óscar británico, por su interpretación del sheriff de Nottingham en “Robin Hood”.
Su último trabajo fue en el montaje de “Las relaciones peligrosas”, el clásico de la literatura erótica francesa, en el teatro londinense Donmar Warehouse’s. En abril se estrenará en los cines británicos la película “Eye In The Sky”, en la que actuó junto a Helen Mirren.
Recientemente se había casado con su amor de juventud Rima Horton, a la que conoció cuando él tenía 19 años y ella 18, y con la que llevaba conviviendo 50 años. No tenían hijos. Su colega en la serie de Harry Potter, el actor James Phelps, que interpretaba al niño Fred Weasley, dijo que acababa de morir “uno de los actores más amables” con los que trabajó.
El actor británico Stephen Fry se deshizo en elogios con Rickman: “que noticia más triste sobre Alan Rickman. Un hombre de semejante talento, atractivo y una presencia tan impactante en el escenario y en la pantalla. Se le echará mucho de menos”.
La muerte de Rickman, muy querido y admirado en el Reino Unido, se ha conocido la misma semana que la del cantante David Bowie. Ambos murieron de cáncer y a la misma edad.