Al popular cantante Marc Anthony le está resultando más difícil de lo esperado desprenderse de la lujosa vivienda que todavía posee en la localidad de Tarzana (California), teniendo en cuenta que en menos de un año se ha visto obligado a reducir la cantidad que pide por ella hasta en dos ocasiones.
Como publica la revista Variety, el intérprete o los responsables de gestionar sus bienes inmuebles han decidido ahora ofertar la propiedad por 3,9 millones de dólares, lo que supone una rebaja sustancial considerando que en agosto de 2015 la casa apareció por primera vez en el mercado inmobiliario a un precio de 4,35 millones de dólares y, solo unos meses después, vio su precio reducido hasta los 4,15 millones.
El mismo medio informa que la mansión fue adquirida por el cantante en enero del año pasado tras desembolsar más de cuatro millones de dólares y que nunca ha llegado a vivir en ella, de lo que se deduce su intención de utilizarla como mera inversión aprovechando su localización privilegiada en el valle de San Fernando y un llamativo exterior que incluye elementos arquitectónicos propios de California y Nueva Inglaterra.
Esta es solo una de las muchas propiedades que el exmarido de Jennifer López ha venido acumulado con el paso de los años. De hecho, en 2015 Marc consiguió vender la mansión de El Encino (California) que poseía desde 2012 a un precio superior al de compra -2,425 millones de dólares frente a los 2,225 iniciales- y ahora está tratando de hacer lo mismo con su extensa finca de Long Island (Nueva York), por la que pagó a principios del año pasado doce millones de dólares y que en estos momentos ofrece por “solo”.