El Senado brasileño reanudó el juicio político de la presidenta Dilma Rousseff.
La cámara alta escuchaba los argumentos de la acusación el martes por la mañana, después que en la víspera Rousseff hizo un alegato en defensa propia. La cámara votará en el curso de esta semana sobre la destitución definitiva de la presidenta, actualmente suspendida.
Se acusa a Rousseff de violar leyes fiscales en el manejo del presupuesto federal. La primera mujer que gobierna Brasil niega haber cometido delito alguno.
Para destituirla se necesitan al menos 54 votos de los 81 senadores. La cámara votó en mayo por 55 a 52 suspenderla e iniciarle juicio político.