primera respuesta del Dalai Lama, de 81 años, es la risa. Luego, tras colocarse la mano en la frente a modo de tupé como el del republicano dice. “No sé, a veces es… así, como la forma de su pelo”. Si detenerse, agrega “y su boca es pequeña”, mientras caricaturiza en movimiento de sus labios con la mano. “Estas son mis impresiones”, concluye tras reconocer, siempre entre risas, que no conoce personalmente a Trump.
Y ya puesto, también opinó sobre el divorcio de Angelina Jolie y Brad Pitt. “Es triste. A veces con gente divorciada los niños se vuelven más próximos a su padre o su madre. Creo que eso podría dañar sus experiencias”. O de Kim Kardashian, quién tiene más seguidores que el Dalai Lama en las redes sociales.