MIAMI, Estados Unidos.- La Escuela Nacional de Ballet (ENB) ha admitido a la primera estudiante estadounidense a tiempo completo, informa la agencia Reuters.
Catherine Conley espera contar con la ventaja de haberse formado en una escuela cubana para cuando regrese a Estados Unidos, pues considera que el estilo del ballet que se enseña en la isla es “acrobático”.
Reuters describe que la enseñanza del ballet en Cuba es subsidiada por el Estado. De la escuela de ballet cubana han salido figuras como Carlos Acosta y José Manuel Carreño, de reconocido estilo internacional.
La ENB afirma por su parte ser la más grande de su tipo en el mundo, con 3 000 estudiantes, muchos de los cuales son extranjeros. Sin embargo, hasta ahora ninguno de EE.UU. había tomado clases a tiempo completo en esa academia.
“Creo que Catherine es la primera de muchos estudiantes estadounidenses que estudiarán en Cuba”, opina el emigrado cubano Victor Alexander, director del Ruth Page Center for The Arts in Chicago, donde Conley estudió ballet desde que era una niña.
Alexander ha estado organizando durante los últimos dos años intercambios estudiantiles y académicos entre su escuela y la ENB, pero estos duraban a lo sumo una semana. El deshielo diplomático entre ambos países hizo que todos los permisos y patrocinadores fueran más fáciles de conseguir.
Victor Alexander quiere que sus estudiantes vean lo que hace “únicos” a los bailarines cubanos. “No tenemos miedo de expresarnos en el escenario, solo lo dejamos ir”, dijo. Y el ballet cubano, añadió, también podría beneficiarse con nuevos aportes.
Por su parte, Ramona de Saa, fundadora y directora de la ENB, rememora la época en que Cuba tenía muchos bailarines de EE.UU. Uno de ellos se casó con su hermana gemela, quien emigró a EE.UU. en los años 60 del pasado siglo y fundó la Pennsylvania Academy of Ballet. Las hermanas no se reencontraron hasta cuatro décadas más tarde.
“Tener esta experiencia (con la Ruth Page School de Chicago) es para sanar muchas cosas”, dijo de Saa a Reuters. “Es muy emotivo”.
Para la estudiante Catherine Conley, en tanto, se siente “surreal” ser la pionera en este programa, que durará un año.
Según Reuters, en el ballet cubano se funde lo mejor de los estilos ruso, francés, italiano, inglés y estadounidense con el talento latinoamericano y la sensualidad afrocubana.