El Alto Tribunal de Londres sentenció este jueves que la activación de la salida de los británicos de la UE requiere un voto del Parlamento, una decisión que podría retrasar el Brexit y que el gobierno dijo que recurrirá.
Tres jueces sentenciaron que la primer ministra Theresa May no tiene el derecho de usar su poder ejecutivo para activar el artículo 50 del Tratado de Lisboa tras el cual comienzan los dos años de negociaciones para establecer las condiciones para que el Reino Unido deje el bloque.
“El Tribunal no acepta el argumento presentado por el gobierno” que juzgaba que el voto del Parlamento no era útil. “El Tribunal acepta el argumento principal de los demandantes”, anunciaron los jueces.
La decisión podría tener repercusiones en el proceso de salida de los británicos de la Unión Europea.
El gobierno británico anunció casi inmediatamente después que apelará la decisión de la justicia ante la Corte Suprema. Esta apelación tendrá lugar a principios de diciembre.
“El gobierno está decepcionado por la decisión del Tribunal. El país votó en favor de abandonar la Unión Europea en un referéndum aprobado por el Parlamento. El gobierno está determinado a respetar el resultado del referéndum. Vamos a apelar”, indicó el portavoz de Downing Street en un comunicado.
La mayoría de los miembros de la Cámara de los Comunes (cámara baja del Parlamento) había hecho campaña para que el Reino Unido se quedara dentro de la Unión Europea, por lo que esta decisión judicial, si es ratificada en apelación, podría abrir la vía a una salida menos brusca o retrasar el Brexit considerablemente.
La libra se reforzó contra el dólar y el euro después de la sentencia del Alto Tribunal, quedando por encima de 1,24 dólares después de semanas de caer a mínimos históricos frente a sus principales competidores.
May anunció el mes pasado su intención de activar el artículo 50 de aquí a finales de marzo, a partir del cual comienza una cuenta regresiva de dos años para la salida de Gran Bretaña de la UE. May argumentó que no necesitaba el voto del Parlamento por las “prerrogativas históricas” del gobierno y la voluntad del pueblo expresada en el referéndum.
El gesto había sido bien recibido por los líderes de la UE que presionan por un divorcio rápido para limitar la incertidumbre sobre el futuro de Gran Bretaña y sobre el resto del bloque.
Pero este calendario puede saltar por esta sentencia. Ahora, los legisladores podrán exigir mayor información sobre la estrategia de negociación del gobierno antes de dar su aprobación.
‘Bronca pública‘
May acusó a los que están detrás del desafío legal de tratar de frustrar el proceso del Brexit. “Están tratando de matarlo retrasándolo”, dijo.
Pero los demandantes -incluyendo un gestor de fondos de inversión, un peluquero y un expatriado que vive en Francia- argumentan que Gran Bretaña ingresó en la UE a través del voto del parlamento, y que sólo este órgano puede tomar la decisión de la salida.
“Estoy agradecido al Tribunal por el resultado, esta es una victoria para la democracia parlamentaria”, dijo el expatriado Grahame Pigney a periodistas fuera del tribunal.
Pigney, que ha utilizado el crowdfunding para montar su “Desafío del Pueblo”, condenó a la primera ministra por su “ataque injustificado e irresponsable” en el caso.
“Ahora espero que todos respeten la decisión de la corte”, dijo.
Nigel Farage, líder interino del Partido de la Independencia del Reino Unido (UKIP), quien dirigió la campaña en favor del Brexit, advirtió que habrá indignación pública si el resultado del referéndum no se pone en marcha.
“Me preocupa que una traición esté cerca”, dijo.
“Ahora temo que se hará todo lo posible para bloquear o retrasar el desencadenamiento del artículo 50. Si es así, no tienen ni idea del nivel de ira pública que provocarán”.
Durante tres días de audiencias en octubre, May admitió que el parlamento tendría probablemente la posibilidad de votar sobre el acuerdo final negociado con el bloque.