Real Madrid tiró de casta, empuje, sudor y un poco de suerte para levantar un partido durísimo ante Sevilla y llevarse un empate a tres goles del Ramón Sánchez Pizjuán que le permite extender la racha de partidos seguidos sin perder a cuarenta, nuevo récord para equipo español.
Zidane, desde la previa, demostró que la consecución del récord era algo secundario. Para el francés, quien decisión tras decisión va dando muestras de su crecimiento como técnico, era más importante la clasificación a la siguiente etapa del torneo, dar confianza a jugadores que no tienen tantos minutos y sobre todo descansar a sus piezas claves para la recta final de la temporada.
Hasta hoy todo le había salido bien al estratega galo, pero el Sevilla de hoy fue el que se esperaba en la ida. Los dirigidos por Jorge Sampaoli incomodaron desde el primer minuto al Real Madrid, llegando por las bandas y por el centro con gran velocidad y haciendo que la zaga madridista se exigiera al máximo.
Los andaluces volvieron loco a Danilo por la banda izquierda y a Marcelo por la derecha, y provocaron que el lateral brasileño, quien hoy ocupaba el lugar de Carvajal, anotara un gol en contra para abrir el marcador. Danilo sigue sin aprovechar sus oportunidades y cada vez se aleja más de la titularidad. El gol representó un impulso aún mayor para los locales, que siguieron probando a Kiko Casilla, autor de varias tapadas de muy buen nivel que mantuvieron al Real Madrid con vida.
La primera mitad, de gran intensidad, terminó con el uno a cero en el marcador, y nada más arrancar la segunda mitad, Marco Asensio colocó el empate merengue. El mallorquín recogió un rechace tras un tiro de esquina en contra y recorrió toda la cancha con balón dominado para marcar uno de los tantos de la fecha.
Sevilla no se amilanó y tan solo cinco minutos después logró ponerse nuevamente en ventaja El recién llegado Stevan Jovetic conectó una volea para batir por bajo a Casilla y volver a darle esperanzas a la afición sevillista. El duelo continuó con su velocidad trepidante, con llegadas de lado y lado, pero fue Sevilla quien aprovechó el momento para al minuto 77 colocar el tres por uno por intermedio de Vicente Iborra.
Con más de diez minutos por delante los de Sampaoli sentían que la eliminatoria seguía viva, pero al minuto 83 todo el trabajo se derumbó. Casemiro se internó al área y fue derribado por la defensa local. El principal no dudó en señalar penalti y Sergio Ramos se encargó de facturar, a lo Panenka, en su antigua casa.
Cuando el partido se consumía, ya con la clasificación en el bolsillo y sin nada que perder, el equipo de Zidane sacó el pundonor y la garra que los caracteriza. Al minuto 90+3, nuevamente en la última jugada del partido, Karim Benzema realizó una jugada espectacular y remató de derecha para colocar la igualdad en el marcador y darle a Zidane el récord de más partidos consecutivos sin caer derrotado.
Así fue como tras una tarde complicada, en la cual fue superado en muchos momentos del duelo, Real Madrid volverá a su casa con un empate, el récord en el bolsillo y su nombre inscrito en los cuartos de final de la Copa del Rey.