Los violines se escucharon en los hermosos jardines del Hotel Hilton Princess para darle la bienvenida a la novia que caminaba al altar del brazo de su padre, mientras las suaves notas musicales de “one thousand years”, parecían impregnar el ambiente con aire romántico y dulce.
San Pedro Sula.- Gillian Lazzaroni, lucía hermosa con un diseño de entallada línea sirena creado especialmente para ella, con su velo de corte catedral se acentuaba la alegría que irradiaba en todo momento. Su ahora esposo, Jean Pierre Sierens, estaba elegante con un traje clásico.
Sus padres, Ulises Lazzaroni, Leticia Owens de Lazzaroni, Bertin Sierens y Bonnie Anderson de Sierens, presidieron el acto en primera fila junto a los padrinos de boda, Francisco Nelson y Nelly Lazzaroni, quienes prometieron guiar a la pareja en su nueva vida de matrimonio.
Los invitados llegaron de diferentes lugares del país y el extranjero para compartir con Gillian y Jean Pierre una de las noches más importantes de su hermosa historia de amor.
Atendidos con variedad de manjares internacionales y lo mejor en bebidas importadas, los amigos y familiares de las familias Sierens-Lazzaroni alzaron sus copas para brindar por la salud y felicidad de los recién casados, que al compás de su melodía favorita, “Solamente Tú”, interpretada por Pablo Alborán, unieron sus corazones.
Los jardines de la estancia, fueron engalanados por Sandrá Rubí, que junto a Delmy Pérez, transportaron a los invitados a un ambiente glamuroso, en donde los tonos cálidos y el aroma de las flores, armonizaron con la aterciopelada voz de Daniel Ochoa.
Gillian Lazzaroni y Jean Pierre Sierens, vivirán por un tiempo en Honduras, para luego continuar sus vidas en el extranjero, llevando por siempre con ellos el recuerdo de su inolvidable noche de bodas, que como en los cuentos de hadas culmina hoy con la expresión: …Y vivieron felices para siempre…
Por: Dayana Ortiz
Fotografías: Samuel Romero