San Pedro Sula.- La boda de Marissa Alejandra Alvarado y Carlos Rafael Platero fue una experiencia verdaderamente inolvidable: varias semanas de absolutos preparativos, en donde el amor reinó en todo momento.
Ella le dio un significado personal a su noche de bodas usando un hermoso vestido de diseño exclusivo con un aire vintage que se distinguía a la distancia, haciéndola lucir verdaderamente perfecta. Para la ocasión, la novia eligió un medio recogido con un moño súper romántico que lucía en la parte posterior del modelo, así como un maquillaje que acentuó con labios carmesí.
Al término de la ceremonia religiosa que realizó el padre Raúl Najarro en la iglesia Nuestra Señora de Suyapa, todos se dieron cita en el salón Las Islas del Hotel y Club Copantl, locación que los novios eligieron para un banquete exquisito y sumamente elegante.
La decoración, por supuesto, sobresalió por la naturalidad y el uso de montajes sencillos que enaltecieran el escenario tan espectacular que los rodeaba. Lugares personalizados para los invitados, y las obligadas copas de champagne no se hicieron esperar para darle un muy buen sabor de boca a la celebración de Marissa y Carlos Rafael.
El ramo de novia fue de estilo clásico en tendencia para lo que resta de este año. Los colores del diseño fueron perfectos: cálidos…al igual que la novia.
Posteriormente, los novios abrieron la pista con un baile súper romántico, para después tener unos momentos con sus padres. Sin lugar a dudas, esta boda tan especial no podía estar completa sin una buena dosis de fotografías en el maravilloso “background” que prepararon para el memorable acontecimiento.
¡Todos los detalles de esta magnífica historia de amor los tenemos aquí a través de las encantadoras imágenes capturadas por el lente fotográfico de Farah La Revista!…Una historia donde las palabras sobran…
Por: Dayana Ortiz
Fotografías: Samuel Romero