Una de las situaciones más insólitas de este fin de semana tiene como protagonista a un futbolista de la sexta división del fútbol inglés: el arquero Max Crocombe, quien fue expulsado por orinar en pleno partido.
Ocurrió en el minuto 87 del encuentro entre el Salford City, un club propiedad del magnate asiático Peter Lim (dueño del Valencia) y algunos ex jugadores del Manchester United (Gary y Phil Neville, Paul Scholes, Nicky Butt y Ryan Giggs), y el Bradford Park Avenue. El guardameta neozelandés, de 24 años, vio la tarjeta roja por no aguantar sus ganas de ir al baño.
“¡Tarjeta roja! Esto es bizarro. Max Crocombe, portero del Salford, fue expulsado. Podemos confirmar que Crocombe ha sido expulsado por orinar sobre el césped durante el partido. No estamos bromeando”, escribieron desde la cuenta oficial de Twitter del club Bradford Park Avenue.
Posteriormente, el propio Max Crocombe se disculpó en las redes sociales: “Me gustaría disculparme sinceramente por mi incidente. Estaba en una posición incomoda y cometí un error de juicio que ha estropeado una gran victoria. Mi intención nunca fue ofender a nadie y me gustaría pedir disculpas a ambos clubes y grupos de seguidores”
La insólita expulsión de Crocombe no impidió, sin embargo, que el Salford City ganara el encuentro por 2-1.