Roatán, Islas de la Bahía.- El Symphony of the Seas de la Royal Caribbean, categorizado como el crucero más grande del mundo atracó hoy en la isla de Roatán con casi 7 mil turistas a bordo, que en su mayoría decidieron bajar de la embarcación para poder disfrutar de las hermosas playas de aguas cristalinas, variedad de deportes acuáticos y por supuesto, la exquisita gastronomía del paraíso terrenal hondureño.
La llegada del Symphony of the Seas se convierte en un acontecimiento histórico para el rubro turístico del país, puesto que la enorme ciudad flotante supera en tamaño a sus hermanas Oasis of the Seas y Harmony of the Seas, todas consideradas como las embarcaciones más grandes del mundo.
El imponente buque de 230 mil toneladas de peso y 361.011 metros de longitud, posee un arqueo bruto de 228,081 en 18 cubiertas con capacidad de 8,400 pasajeros y 2,600 tripulantes. Para su descanso, los pasajeros disponen de 2,759 camarotes cómodamente acondicionados.
Sus instalaciones incluyen un parque acuático para niños con el tobogán más alto en alta mar, cancha de basketball de tamaño completo, pista de patinaje sobre hielo y 2 muros de escalada de 43 pies; también dispone de cerca de 20 restaurantes con diferentes y variados menús internacionales.
Hizo sus primeros viajes en la primavera navegando por el mediterráneo y luego, en el otoño, tomó la ruta del caribe que incluyó paradas en Puerto Costa Maya y Cozumel en México; Nassau en Las Bahamas y Roatán en Honduras.
El presidente de la república, Juan Orlando Hernández, a través del programa 20/20 prioriza al turismo como uno d elos pilares de desarrollo económico y contonúa trabajando para que Roatán sea el puerto número 1 entre 10 puertos de la región del Caribe.
Se estima que este año se alcanzará la suma de más de 1.2 millones de cruceristas visitando el país, puesto que solo en el puerto de Roatán se recibirán a más de 700 mil turistas y en el Mahogany Bay llegarán más de 500 mil cruceristas.
La llegada de los turistas resulta indispensable para la economía de la isla y el turismo en general debido a que cada persona que baja de un barco gasta un promedio de 90 dólares en compra de souvenirs, transporte interno, actividades recreativas, bares y restaurantes.
Por: Dayana Ortiz