San Pedro Sula.- Eliu y Kibissay son una de esas parejas que comparte su pasión por el campo y los caballos, a la vez que el amor. La vida es tan sabia que siempre quedan sueños por cumplir, y en el gran día de este par de enamorados se hicieron realidad muchos de los suyos, iniciando su velada nupcial en la Iglesia La Santa Cruz…un acontecimiento único, repleto de detalles personalizados ¡y para muestra, un botón! La novia, acompañada de su padre, llegó a su cita nupcial a bordo de un carruaje tirado por un frisón ¡y por supuesto! el apuesto novio apareció montando su ejemplar cuarto de milla a quien llama “Maximus” ¡fascinante!
¿Montar una celebración postboda en un predio citadino? Sí, quisieron. Organizaron la fiesta de sus sueños contando con la ayuda de Keyla Rivera –hermana del novio– quien desempeñó audazmente el papel de wedding planner, logrando un éxito rotundo en la recepción, puesto que todos sus seres queridos y selectos invitados vivieron una de las noches que no se cansarán jamás de recordar ¡Única!
A pesar de que el enclave no permitía tener un plan B ante las sorpresas del clima y el espacio no estaba idealmente pensado para la celebración de eventos, Keyla, con la implicación de algunos familiares, montaron una boda donde más cómodos no se podían sentir. De esta manera, el lugar funcionó perfecto en su distribución para el área de aperitivos, barra de bar, pista de baile y banquete, con el propio encanto natural del verde predio, el mobiliario y la decoración handmade que elaboró Serenity Deco Events.
La creativa puesta en escena sucumbió a un sinfín de detalles que aportaron un toque especial a la temática de inspiración rústica-chic que envolvió la atmósfera de celebración, donde la tenue iluminación compartió protagonismo con el show de luces pirotécnicas y los destellos que se desprendían de las verdes copas en los árboles del lugar. Lámparas campestres con románticas velas aromáticas armonizaron la apuesta floral natural que realzó tonalidades blanco y rosa palo entre finos y cálidos lienzos.
La noche superó las expectativas de los novios y las de todos sus invitados. Empezó con las formalidades del protocolo, donde el tradicional brindis fue oficiado por el padre de Eliu; contó con un emotivo instante, cuando la madre de la novia reveló que la boda se estaba celebrando precisamente en la misma fecha en que ella y su esposo cumplían 33 años de casados… hicieron tanto reír como llorar a más de uno…
Transcurrió el primer vals de los novios y llegó la hora de la celebración. ¡Aperitivo, banquete y fiesta! El catering estuvo a cargo del chef Mario Ortíz del Hotel Hilton Princess y fue súper característico; incluyó los platillos preferidos de la pareja: se sirvieron fajitas de res, rollos de pollo rebozados en salsa de espinaca, fetuccini y crocantes vegetales. La comida fue espectacular. Triunfó el bufé de postres con el exquisito Cheesecake y una amplia variedad de quesos y frutas cortadas ¡Exitazo!
Con el reconocido Cris Davis en su doble papel como maestro de ceremonias y amenizador musical junto a su banda, la velada se tornó tan vibrante como inolvidable para quienes acompañaron a Eliu y Kibissay en su noche de bodas ¡culminaron su fiesta a las 5 de la mañana del siguiente día! y partirán el próximo jueves 23 de mayo rumbo a Disney World en su viaje de luna de miel que prolongarán durante 9 días.
Para convertirse en esposa de Eliu, Kibissay se enfundó un modelo que adquirió en Kalas Boutique con escote corazón, abotonadura por detrás y cuerpo de encaje, falda asirenada y larga cola. Fiel a su estilo poco recargado, lo combinó con un ramo de follajes silvestres y rosas de tonalidades cálidas; el recogido desenfadado y maquillaje súper natural que Melisa Gudiel Studio esculpió en sus bellas facciones complementó su apuesta de novia. Eliu se mostró como todo un galán vistiendo un traje de Zara´s color caki, conjuntado con una camisa blanca y corbata tejana para no faltar al “dress code” que llevaron los caballeros del cortejo: el calzado vaquero de Kerin Boots y su sombrero. Todos, ¡tan personales como estupendos!
Los profesionales de la fotografía que hay detrás de Farah La Revista, junto a René Matute, fueron testigos del encanto de este enlace y confiesan que vivieron el reportaje nupcial como un “disfrute total”. Por su parte, Eliu Rivera Pineda y Kibissay López Milla aseguran que repetirían esa noche sin pensarlo, pero que lo harían a cámara lenta para sentirse flotando de felicidad más tiempo… No hay duda: ¡fue increíble! Palpar la armonía creada por la pasión de ambos en una fiesta de inspiración rústica ¡No hay más!…
Por: Dayana Ortíz
Fotografías: ElDiarioHN
