LA HABANA.- La sesión legislativa en la que se hará la histórica transición política en Cuba y en la cual se elegirá al sucesor del actual presidente Raúl Castro fue adelantada un día.
Ahora la Asamblea del Poder Popular, como se denomina al Legislativo en la isla, abrirá sus puertas el miércoles, informaron medios de prensa oficiales en una breve nota.
Esta decisión se adopta para facilitar el desarrollo de los pasos que requiere una sesión de tal trascendencia”, se informó.
La nota oficial no aclara si el adelanto de la fecha significa que la sesión parlamentaria durará dos días o simplemente será monográfica el miércoles.
La sesión estaba prevista para el jueves y será la primera vez que una persona que no se apellide Castro tome el liderazgo de Cuba en más de cinco décadas.
En esta reunión, una comisión integrada por los 605 diputados electos en estos comicios elaborará y someterá a la votación de la recién renovada Asamblea una propuesta que incluye al presidente, primer vicepresidente, cinco vicepresidentes y 23 miembros del Consejo de Estado, el máximo órgano dirigente de la isla.
Durante la sesión se producirá el relevo en la Presidencia del país, ya que Raúl Castro, de 86 años, deja las riendas del Gobierno en cumplimiento de la limitación de mandatos a un máximo de diez años decretada por él mismo.
Si no hay sorpresas, el favorito para el relevo es el actual primer vicepresidente del país Miguel Díaz-Canel, de 57 años.
No obstante, Raúl Castro seguirá como primer secretario del Partido Comunista de Cuba (PCC, único) hasta el próximo congreso de esta formación previsto para el año 2021.
Los dos hombres que han gobernado Cuba durante casi seis décadas nacieron en una parte remota y rural de la isla, Birán, en el seno de una adinerada familia agrícola.
Tanto Fidel como Raúl Castro se inclinaron por la política radical a una temprana edad, durante su época de estudiantes primero en una escuela de Santiago, una ciudad en el este del país, y más tarde en la universidad de La Habana.
Saltaron a la primera plana en 1953 como líderes de un quijotesco y fallido ataque al cuartel de Moncada, en Santiago, con el que esperaban derrocar la dictadura de Fulgencio Batista.
Fueron encarcelados, recuperaron la libertad gracias a una amnistía y se exiliaron a México, donde organizaron una guerrilla y regresaron a la isla a bordo de un barco, el ‘Granma’, en 1956.
Pese a los primeros reveses, los barbudos guerrilleros que operaban en las montañas del este fueron ganando apoyos en todo el país.
El 1 de enero de 1959, Batista huyó de la isla y Fidel Castro se convirtió en el líder incuestionable de Cuba, con su hermano menor al frente de las Fuerzas Amadas.
En un primer momento, el gobierno de Fidel Castro ejecutó o encarceló a muchos enemigos, y se inclinó hacia un socialismo de inspiración soviética a principios de la década de 1960. Cuba respaldó revueltas en toda Latinoamérica y, aunque la mayoría fracasaron, la resistencia de los Castro al dominio estadunidense inspiró a millones de personas en el todo el mundo.
El control de Fidel Castro sobrevivió a los repetidos intentos de Washington para derrocarlo o asesinarlo, incluso tras los problemas que sucedieron al colapso de la Unión Soviética en 1991, que había mantenido a flote la economía de la isla.
Finalmente, en 2006 una enfermedad obligó a Fidel a ceder el poder a Raúl, quien asumió formalmente la presidencia dos años después.
Fidel falleció en 2016 y Raúl, que cumplirá 87 años en junio, anunciió que dejará el cargo este mes, aunque planea mantener un cargo posiblemente más importante: el de presidente del único partido de la isla, el Partido Comunista.