El clásico entre el Barcelona contra el Real Madrid, disputado en el Santiago Bernabéu como parte de las semifinales de la Copa del Rey, fue dominado por el brutal ataque de los culé a la portería de Keylor Navas en el segundo tiempo, con lo que han puesto el tablero en 0-3.
Al comienzo de la segunda parte, llegó el primer gol del encuentro protagonizado por Luis Suárez, quien remató un pase de Dembelé que Navas no pudo detener e irse encima en el marcador.
En el minuto 63, un cabezazo de Reguilón estuvo muy cerca de empatar el partido, pero Ter Stegen lo detuvo.
Pero a los 68 minutos del encuentro, se incrementó la diferencia en el marcador, con un gol en puerta de Raphael Varane, en una jugada entre Dembelé y Suárez que terminó por empujar entre los tres postes el defensor merengue.
Y 5 minutos más tarde, el tercero de los culé fue anotado por Suárez en un disparo de penal, otorgado por una falta de Casemiro al uruguayo.
El encuentro comenzó con una jugada peligrosa sobre los 10 minutos, que casi amerita penal para el merengue, con una ligero golpe de Semedo en la pierna de Vinicius Jr. cuando se disponía a disparar desde dentro del área, sin embargo, el VAR descartó la falta.
Durante el primer tiempo, el Barcelona estuvo tomando terreno y manteniendo la posesión del balón pero con poca efectividad gracias al juego desordenado del equipo, que dio cabida para que el Real Madrid usara su mejor arma, el contraataque, dirigido por Vinicius y Karim Benzema, la mortal dupla merengue que consiguió tres oportunidades claras para el gol, aunque no pudo aprovechar ninguna para irse al descanso en 0-0.
El partido disputado en la casa del equipo merengue corresponde al choque de vuelta entre ambos equipos, pues la ida se disputó en el Camp Nou de los culé, y resultó en empate 1-1, con goles de Lucas Vázquez y Malcolm.
Los dirigidos por Santiago Solari llegaron a este encuentro con la ventaja del gol de visitante frente a los de barça, y a pesar de haber dominado durante la mayoría del partido, con este resultado en contra se despidieron de la Copa del Rey.
El Barcelona ha ganado cuatro de sus últimas cinco visitas en el Bernabéu, marcando 13 goles en todos los encuentros. El 25 de mayo jugará su sexta final de Copa del Rey consecutiva.