China rechazó el martes las “presiones, amenazas y chantajes” de Estados Unidos después de que el presidente Donald Trump amenazara con imponer aranceles adicionales del 50 % a la segunda economía mundial.
“Las guerras arancelarias no tienen ganadores, y el proteccionismo no tiene salida. El pueblo chino no crea problemas, pero tampoco los teme. La presión, las amenazas y el chantaje no son la forma correcta de tratar con China”, dijo el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores, Lin Jian.
“Si EE. UU. realmente quiere dialogar, debería demostrar una actitud de igualdad, respeto y beneficio mutuo”, sostuvo Lin, quien subrayó que, si Washington “insiste en una guerra arancelaria o comercial” sin tener en cuenta “los intereses de ambos países y de la comunidad internacional”, China “estará preparada para llegar hasta el final”.
El vocero recalcó que la “soberanía, seguridad e intereses de desarrollo” de China “no son negociables” y advirtió que su país “continuará tomando medidas firmes y contundentes” para proteger sus derechos legítimos.
La nueva ronda de declaraciones llega tras la advertencia de Trump, quien amenazó con nuevos gravámenes si China no desiste de su respuesta a los aranceles que Estados Unidos impuso el 2 de abril, elevando el tipo mínimo a todas las importaciones al 10 %, con tarifas más elevadas para ciertos países como China (34 %) o la Unión Europea (28 %).
Pekín respondió con un paquete de contramedidas que incluye un arancel recíproco del 34 % a todas las importaciones estadounidenses, así como sanciones a determinadas empresas, restricciones a la exportación de tierras raras y la suspensión de importaciones agrícolas.
Fuente: EFE / AFP