Debido a las amenazas que han recibido en los últimos días, los integrantes de la Comisión Especial para el Proceso de Depuración y Transformación de la Policía Nacional sacaron del país a sus familias, confirmó este martes el asesor, Carlos Hernández, quien también es representante de Transparencia Internacional (TI).
Respecto a si ya sacó a su familia, Hernández manifestó que “lamentablemente sí, es una situación que se dio, es una situación compleja, difícil, pero creo que lo importante es que todos los miembros de la Comisión seguimos en Honduras, trabajando con fuerza y determinación para que este trabajo pueda realizarse y llegar a feliz término”.
Al mismo tiempo, reiteró que seguirán adelante tomando las determinaciones aunque no sean fáciles.
“En Honduras debe haber seguridad para todos, porque son muchos los hondureños que están expuestos a situaciones de inseguridad cada día”, indicó, para comentar que siente tristeza por aquellos que no pueden sacar a sus familias del país.
Hernández apuntó que serán los órganos de seguridad del Estado que determinarán de dónde provienen las amenazas.
Así, el comisionado depurador, Omar Rivera, manifestó que “esta es una etapa histórica de la vida institucional del país que no admite punto de retorno, independientemente de cualquier amenaza y riesgo que se pudiese presentar para los miembros de esta comisión o de la Secretaría de Seguridad”.
La Fiscalía Especial de Derechos Humanos del Ministerio Público (MP) abrió un expediente investigativo para indagar las amenazas contra los depuradores: Omar Rivera y el pastor Alberto Solórzano y sus familias.
La fiscal especial, Soraya Morales, confirmó en declaraciones recientes que “la Fiscalía ha considerado abrir una denuncia en torno a las supuestas amenazas de que están siendo objeto los comisionados que están en el proceso de intervención de la Policía Nacional,es así que estamos haciendo varias diligencias para el esclarecimiento de los hechos”.