Estudiar las explosiones más violentas del universo. Será el objetivo del telescopio espacial UFFO (acrónimo de observatorio ultrarrápido de flashes en inglés), desarrollado por una colaboración internacional liderada por Corea.
España está presente en este proyecto, del que también forman parte Taiwán, Dinamarca y Rusia, a través del Instituto de Astrofísica de Andalucía y de la Universidad de Valencia.
El presidente de Rusia, Vladimir Putin, fue uno de los testigos del lanzamiento, que se efectuó a las 4:01 de la madrugada, hora española. Es el primero que se realiza desde el nuevo cosmódromo de Vostochny (en Rusia), próximo a la península de Kamchatka y cerca de la frontera con China.
Apenas tres horas después y a bordo de la nave Lomonosov, el telescopio se ha situado en su órbita definitiva, a 490 kilómetros de altura, con los paneles solares ya completamente despegados. Desde esa posición analizará durante tres años los estallidos de rayos gamma, el fenómeno más virulento del espacio.
Se produce tras la muerte de estrellas con una gran masa o por la fusión de dos estrellas. El UFFO está dotado de detectores para registrar la emisión de rayos X, luz visible y ultravioleta asociada a los instantes iniciales de estos estallidos cósmicos.
Los datos que se obtengan permitirán comprender en detalle procesos energéticos sólo superados en potencia por el Big Bang y escuchar los ecos de estallidos producidos hace 12.000 millones de años, cuando el universo acababa de formarse.