Tegucigalpa.- La marcha que miles de personas realizaron este martes en Tegucigalpa para celebrar el Día del Trabajador terminó con disturbios, enfrentamientos entre manifestantes y policías, y el incendio parcial de la sede de la alcaldía capitalina.
Las acciones violentas impidió que la dirigencia de las centrales obreras leyeran su tradicional pronunciamiento al concluir la marcha conmemorativa al Día Internacional del Trabajo.
Por un lado la dirigencia obrera señaló a las fuerzas de seguridad del Estado de iniciar provocaciones al lanzarles gas lacrimógeno y agua para dispersar a las personas que participaban en la manifestación.
Mientras, la Policía Nacional indicó que personas infiltradas en la marcha de los trabajadores comenzaron a hacer disturbios por lo que los uniformados tuvieron que disuadirlos con gas y agua.
El centro de la capital se convirtió en una batalla campal entre manifestantes y policías, al punto que quemaron parte del edificio de archivos de la Alcaldía Municipal de Distrito Central.
Las marchas, en la capital y en otras ciudades de Honduras, comenzaron a primeras horas de la mañana y entre las consignas usuales pidieron la renuncia del presidente Juan Orlando Hernández. Además, los manifestantes se protestaron contra la Ley de Empleo por Hora y el alto costo de los precios de los productos de la canasta básica y de las tarifas de los servicios públicos.