San Pedro Sula. – Edgard Francisco Pinto Murillo y Andrea Nicole Peña Peña, hicieron de su boda el mejor de los acontecimientos al permitir a sus selectos invitados compartir con ellos uno de los días más felicites en sus vidas… la naturalidad de sus protagonistas y palpable disposición de quienes se unieron a su fabulosa noche nupcial de corte romántico.



Fue precisamente en la Iglesia Nuestra Señora de Suyapa, donde Edgard y Andrea intercambiaron sortijas y votos matrimoniales para luego protagonizar su fabulosa fiesta postboda en los salones Palestina y Natividad del Club Hondureño Árabe, que ataviados con un diseño floral fusionando blancos y nude con verdes follajes, largos cortinajes y hermosos chandelier, abrieron sus puertas con una puesta en escena planeada y coordinada por Marcela Cueva.


Los ahora esposos se pasearon por la estancia de la mano y disfrutaron su alegre velada al ritmo de DJ Daybeat, haciendo de su mágica noche de bodas el mejor de los recuerdos compartidos entre su amplio círculo social.















