El cáncer de pulmón, el tercer tipo más frecuente de esa enfermedad y el que causa más muertes en América, sigue su “desalentador” avance en el continente, en donde mata a más de 260.000 personas cada año.
“El panorama es de verdad desalentador. Las campañas que se han hecho en esta parte del mundo no han sido lo suficientemente contundentes como para concientizar a las personas sobre esta enfermedad”, explicó Juan Carlos Mejía, coordinador del grupo de patología oncológica del Instituto Nacional de Cancerología de Colombia, a propósito del Día Internacional del padecimiento.
Según el experto, el aumento del consumo de tabaco, la principal causa del cáncer de pulmón, ha hecho que las proyecciones de la enfermedad prevean un aumento en su incidencia en la población americana, sobre todo en regiones como América Latina y el Caribe.
De acuerdo con los últimos datos disponibles de la Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer (Globocan) de 2012, en 2030 se espera que se presenten más de 541.000 nuevos casos y unas 445.000 muertes por cáncer de pulmón en Américas, lo que representa casi el doble de las estadísticas actuales.
“Es por eso que hace falta más educación. Hacer más efectivas las campañas de los gobiernos y educar sobre el daño que el tabaco puede provocar a la salud”, añadió Mejía, quien aseguró que el de pulmón es la segunda causa de muerte por cáncer en América Latina en hombres y la sexta en mujeres.
El experto recalcó que el tabaquismo sigue siendo el factor de riesgo más importante para contraer este tipo de cáncer, pues cerca del 80 % de las muertes por este padecimiento se debe a este hábito o a recibir humo de cigarrillo de manera pasiva.
“Lo que deben hacer los Gobiernos es endurecer los impuestos a las tabacaleras para que el consumo de cigarrillos disminuya. Las campañas de mostrar los daños del cigarrillo en las cajetillas no está funcionando. Cada vez más jóvenes están fumando”, consideró.
Sin embargo, el tabaco no es la única causa de cáncer de pulmón, pues “se ha comprobado que sustancias químicas en el trabajo”, como el radón, el asbesto y otros agentes cancerígenos o minerales radioactivos, “influyen en su desarrollo”, acotó.
Explicó además que la enfermedad no distingue entre hombres y mujeres, pero su incidencia varía de acuerdo a la región del continente, sobre todo teniendo en cuenta “que en ciertas partes los hombres son más propensos al tabaquismo que las mujeres”.
Según Globocan, por ejemplo, en Norteamérica casi la mitad de los casos de cáncer de pulmón se presentan en mujeres, mientras que en Latinoamérica y el Caribe más de dos tercios de los nuevos casos se presentan en hombres.
En las mujeres, de acuerdo con el informe del organismo adscrito a la Organización Mundial de la Salud (OMS), el número de nuevos casos de cáncer de pulmón es casi 4 veces mayor en Norteamérica que en América Latina y el Caribe.
En los hombres, en tanto, el número de casos nuevos y muertes por este tipo de cáncer es más de 2 veces mayor en Norteamérica que en Latinoamérica, aunque en esa última región se espera que los diagnósticos en mujeres se dupliquen en 20 años y los nuevos casos y muertes en hombres se incrementen en hasta un 50 %.
“Sin duda, el mejor hábito de higiene para prevenir el cáncer de pulmón es no fumar. El segundo, que las empresas incluyan programas de salud ocupacional para evitar que sus empleados estén expuestos a sustancias cancerígenas”, recomendó Mejía.
El experto aconsejó, además, someterse a chequeos periódicos, sobre todo en lugares en donde la exposición a los factores de riesgo sea directo y concluyó que ya existen en el mercado tratamientos efectivos y directos para eliminar las células del cáncer pulmonar, “siempre y cuando la enfermedad esté empezando”.
Destacó que entre los principales síntomas de la enfermedad están fiebre, sonidos anormales de los pulmones que se escuchan a través de un estetoscopio, tos con pintas de sangre, debilidad, dolor muscular, dificultad para respirar, disfonía o pérdida de peso.
Entre los tipos más comunes de cáncer de pulmón están el Microcítico (células pequeñas) o el No Microcítico (células no pequeñas), de acuerdo con las investigaciones médica sobre el tema.
Este tipo de cáncer comienza en las células que revisten los bronquios y en otras partes del pulmón, como los bronquiolos o los alvéolos y puede ser letal debido a que las células cancerosas pueden desprenderse del tumor original y propagarse a otros órganos.