EEUU.- Luego de que Trump diera marcha atrás respecto a su condena de ayer martes al Ku Klux Klan, a los neonazis y a los supremacistas, que llegó forzada por la tibieza de su primera reacción al asesinato, el histórico dirigente del Ku Klux Klan David Duke, alabó hoy al presidente de Estados Unidos, por “decir la verdad” sobre lo sucedido en Charlottesville y condenar a los “terroristas de izquierda”.
Esto ocurrió después que el mandatario señalase a los dos bandos por la violencia racista. “Hubo un grupo de un lado que fue malo y hubo un grupo del otro lado que también fue muy violento”, agregó Trump respecto a la violencia de Charlottesville, donde un neonazi mató a una mujer que participaba en una manifestación antirracista en rechazo a los supremacistas blancos.
“Gracias presidente Trump por su honestidad y coraje para decir la verdad sobre Charlottesville y condenar a los terroristas de izquierda del (movimiento) Black Lives Matter y antifascistas”, dijo Duke en su cuenta de Twitter.
Duke, un supremacista blanco y negacionista del Holocausto, reaccionó así a las palabras de Trump, que hoy volvió a culpar a “los dos bandos” de la violencia desatada este sábado en Charlottesville y puso especial énfasis en la responsabilidad de la izquierda.
Por otro lado, un líder del KKK amenazó con quemar a la periodista afroamericana colombiana Ilia Calderón durante una entrevista que le hizo en julio pasado en Carolina del Norte para la cadena hispana Univisión.
Durante la entrevista, Chris Barker, líder de los Leales caballeros blancos, una rama del Ku Klux Klan, señaló a Calderón que era la primera afroamericana que pisaba el lugar donde se agrupaban. La presentadora de la edición nocturna del Noticiero Univisión señaló que “nunca había experimentado una agresión personal tan profunda”.
Barker, abanderado de la supremacía blanca sobre todas las razas, lanzó insultos y llegó a amenazar a la entrevistadora con quemarla, detallaron medios de comunicación estadounidenses. “Mi propósito principal era poder vivir esta experiencia y contarla, para que la gente trate de entender qué hay en la cabeza de ellos y sepan a lo que se pueden exponer allá afuera”, explicó la periodista.