El papa Francisco impulsó la creación de un fondo con una asignación inicial de 1 millón de euros, a Cáritas de Roma para ayudar a los afectados por la crisis económica derivada de la pandemia del coronavirus.
“He decidido instituir en la diócesis el fondo ‘Jesús divino trabajador’ para resaltar la dignidad del trabajo, con una financiación inicial de un millón de euros”, escribió el Santo Padre en la misiva firmada el 8 de junio, quien exhortó a todos a contribuir con generosidad y solidaridad a los de “la puerta de al lado”.
“Una señal capaz de animar a todas las personas de buena voluntad a ofrecer un gesto concreto de inclusión, especialmente con aquellos que buscan consuelo, esperanza y reconocimiento de sus derechos”, destacó.
Jorge Bergoglio se comunicó con el vicario general para la diócesis de Roma, el cardenal italiano Angelo De Donatis, para lanzar dicho proyecto.
Afirmó que con esta iniciativa se mitigará el impacto del virus en los trabajadores con contratos temporales, pagados por horas, empleados domésticos, pequeños empresarios y autónomos.
“Invito a todas las instituciones y a nuestros conciudadanos a compartir generosamente lo que tienen en este momento lleno de necesidades”, subrayó.