Las economías de Latinoamérica tendrán que seguir ajustándose ante el derrumbe de los precios de las materias primas, en un entorno cada vez más complicado principalmente para los países sudamericanos con desequilibrios internos, dijo el responsable del Fondo Monetario Internacional (FMI) para la región.
Las advertencias fueron publicadas ayer en el informe “América Latina y el Caribe en 2016: Ajustándose a una realidad más dura” de Alejandro Werner, director del Departamento del Hemisferio Occidental del FMI, que destacó la alta volatilidad financiera por los temores sobre la economía china.
“El año 2016 será un momento para que las autoridades de la región actúen con cautela”, dijo el reporte. “Es necesario permitir que el ajuste continúe y preservar los márgenes de maniobra de política económica”, agregó, citando las diferencias en una región que se pasea entre la relativa estabilidad en México y la crisis en Brasil.