San Pedro Sula.- Tres ejemplares mujeres fueron galardonadas en el tradicional concurso Madre de la Maquila, que por noveno año consecutivo la Asociación Hondureña de Maquiladores desarrolla, con el objetivo de reconocer públicamente a madres trabajadoras de la industria, que al igual que miles de hondureñas tienen una historia increíble que contar.
La ganadora del primer lugar fue la señora Alba Lidia Guzmán Cruz, una joven madre soltera que comenzó a trabajar hace 9 años en la empresa confecciones Dos Caminos de la Corporación Fruit Of The Loom, para poder brindar a su hijo de un año en aquel momento el tratamiento que requería en vista que nació con mielomeningocele que es una especie de tumor en la columna vertebral que pesaba casi una libra, nació con un riñón y otras complicaciones propias de esa enfermedad.
En medio de esa triste realidad Alba Leticia mostró más que una leve esperanza, una fe que mueve montañas que la llevó a trabajar en la maquila para darle lo necesario a su retoño que ha sido operado en nueve ocasiones. Además de este esfuerzo extraordinario por asegurar la recuperación de su hijo, Alba Leticia decidió estudiar y culminar su secundaria y está próxima a graduarse de enfermera, compró el terreno donde vive su Mamá, construyó su propia casa y adicionalmente adquirió un vehículo para ponerlo a trabajar haciendo fletes y generar de esa forma otros ingresos.
El segundo lugar correspondió a la señora Martha Leticia Morales Zúniga, quien gracias a su primer y único trabajo en la empresa FIVARO logró educar a sus tres hijos y la vez superarse laboral y académicamente al iniciar su trabajo como operaria hace 20 años y fue promovida en varias posicione hasta desempeñarse actualmente como asistente del departamento de Recursos Humanos donde se desenvuelve con profesionalismo y responsabilidad.
La señora Bertha Rodríguez de Dickies Honduras, obtuvo el tercer lugar, una joven madre que a pesar de haber optado por emigrar de honduras a España se dio cuenta que su lugar estaba al lado de su hijo para apoyarlo no solo en su sueño de ser médico, sino en su vida diaria a través de sus consejos y atenciones que jamás son iguales estando lejos.
Fue así como Bertha regresó a Honduras y desde hace 16 años que labora para Dickies Honduras ha logrado cumplir con el sueño de su hijo que actualmente cursa el tercer años de la carrera de medicina y cirugía en la Universidad Católica de Honduras y además logró comprar un cabezal para generar otros ingresos a su familia.
Las tres extraordinarias damas fueron galardonadas en una ceremonia especial en el Hotel Copantl, junto a sus hijos, familiares y ejecutivos de las empresas para la cual laboran, así como autoridades de la Asociación Hondureña de Maquiladores, donde recibieron un premio en efectivo, una canasta de alimentos y otros obsequios.