El desbloqueo del pago a los bonistas que entraron en los canjes de 2005 y 2010 fue la única condición impuesta por la oposición para votar a favor del acuerdo.
El Senado argentino convirtió en ley la madrugada del jueves el acuerdo para un pago millonario a los fondos especulativos en Nueva York, en lo que constituyó la primera victoria política del presidente Mauricio Macri, quien logró un respaldo opositor clave en el Parlamento.
Con 54 votos a favor y 16 en contra, y tras casi 15 horas de debate, la Cámara alta dejó en firme el acuerdo para pagar 4.653 millones de dólares, suscripto por Argentina con los fondos NML Capital y Aurelius, entre otros, tras un largo litigio.
La ley impulsada por el gobierno de centroderecha autoriza además al Ejecutivo a endeudarse hasta unos 12.500 millones de dólares, una de las mayores emisiones de un país en desarrollo desde 1996.
El gobierno de Macri considera que con el fin de este extenso litigio se abrirá la puerta al financiamiento internacional para las provincias argentinas, se evitará un ajuste fiscal y una hiperinflación, tras 15 años sin tener acceso a los mercados financieros.
Antes de la votación, Macri había reconocido como “una muestra de madurez, de sensatez” lo que ocurría en el Senado, donde “nosotros en minoría conseguimos el consenso de muchos más” para impulsar la iniciativa, dijo en una entrevista del canal de noticias TN.
Varios legisladores del opositor Frente para la Victoria (FPV, peronismo de centroizquierda), bloque mayoritario con 42 de las 72 bancas del Senado, votaron a favor empujados por la necesidad de financiamiento de las provincias a las que representan.
“Nuestro bloque va a votar en un ejercicio de libertad individual, yo lo voy a a hacer por la afirmativa”, anunció en el recinto el jefe de la bancada del FPV, Miguel Pichetto, pese a calificar el acuerdo de “injusto y doloroso”.
El senador Angel Rozas, jefe de la bancada radical (UCR, socialdemócrata), aliada de Macri, denostó a los fondos “buitres, que son personajes nefastos del mundo financiero”, pero consideró que tras haber perdido todas las instancias judiciales en Estados Unidos, Argentina tenía “un solo camino”, que es pagar lo adeudado.
“No estoy esperando que lluevan dólares del cielo, pero es mejor no estar en default técnico”, insistió.
Al anunciar su voto en contra, la senadora por el FPV María Ester Lobato diferenció el pago a los ‘holdouts’ de los canjes de deuda logrados en 2005 y 2010 con algunos acreedores, al sostener que estos “fueron justos y equitativos que es lo contrario de lo que se pretende hacer ahora”.
A pedido de la justicia de Nueva York, la ley aprobada contempla la derogación de las leyes Cerrojo -que impedía ofrecer cualquier mejora a un acreedor sin otorgársela de inmediato a todos los demás- y de Pago Soberano, que establecía a Buenos aires como sede del pago.
Desde la sentencia judicial adversa en 2012, la entonces presidenta Cristina Kirchner había rechazado pagar en efectivo el 100% de la deuda y beneficiar a los fondos conocidos como ‘buitres’, en desmedro del resto de los acreedores.
El 14 de abril, se paga
Uno de los obstáculos más temidos podría venir de la justicia de Nueva York, donde la Cámara de Apelaciones convocó a una audiencia el 13 de abril para analizar el reclamo argentino a que se habilite el pago a los bonistas que entraron en los canjes de 2005 y 2010, que fue bloqueado a pedido de los fondos ‘buitres’.
La audiencia se realizará el día antes de la fecha impuesta por el juez neoyorquino Thomas Griesa para que Argentina pague a esos fondos, lo que “genera dudas sobre el mantenimiento de la fecha de pago”, afirmó el consultor Rosendo Fraga.
Pero Macri aseguró el miércoles que Argentina podrá cumplir. “(El ministro de Hacienda, Alfonso) Prat-Gay dice que va a poder llegar al 14 de abril”, señaló el presidente.
En la Cámara de Apelaciones de Nueva York, Argentina recibió un inédito respaldo del gobierno de Estados Unidos la semana pasada, en coincidencia con la visita del presidente Barack Obama a Buenos Aires.
En su presentación como Amicus Curiae, el fiscal de EEUU para el distrito Sur de Nueva York, Preet Bharara, señaló que no levantar el bloqueo de fondos para el pago a bonistas reestructurados, tendría “graves consecuencias para la economía argentina y para los intereses de Estados Unidos en la región”.
En una carta abierta a los senadores, dirigentes sindicales y humanitarios, intelectuales y artistas instaron a votar en contra del pacto para evitar “ingresar a la historia como cómplices de la entrega”.
“Abajo el pacto buitre”, se leía en carteles enarbolados por unos pocos manifestantes de partidos de izquierda que expresaron su rechazo al proyecto de ley en las puertas del Congreso mientras se realizaba la sesión.