La actriz Emma Watson emprenderá acción legal contra quien resulte responsable de haber filtrado en la web unas fotografías suyas con poca ropa, tomadas durante las sesiones de vestuario en el rodaje de The Beauty & The Beast (La Bella y La Bestia).
En las imágenes la protagonista de la saga cinematográfica Harry Potter se muestra en bikini y supuestamente otras en la bañera ya circulan por lo que se conoce como el internet profundo, es decir, la dark web o deep web, cuyo contenido no es indexado por los motores de búsqueda.
“Las fotos son de una sesión de ropa que Emma tuvo con un estilista hace un par de años. Y han sido robadas”, aseguró el vocero de Watson.
“No son fotografías pornográficas. Los abogados ya están al caso”, agregó.
También su colega Amanda Seyfried es otra de las afectadas, junto a otros nombres que todavía no se han revelado, puesto que se filtraron 22 fotos suyas mucho más comprometedoras, ya que en ellas aparece junto a un chico practicando sexo oral.
Esta no es la primera vez que Watson es víctima de los hackers, ya que en 2014 recibió amenazas, a través de una página de internet, de publicar unas fotos suyas totalmente desnuda.