San Pedro Sula. – “Ya hemos comenzado”, dijo hoy lunes el secretario del Plan de Nación y coordinador de las actividades de limpieza que impulsa el Gobierno, Mario Pineda, mientras recorría los bulevares aun inundados de la colonia Planeta, cuyos habitantes perdieron todo por las inundaciones provocadas por las tormentas Eta e Iota.
Estos miles de afectados son atendidos a través de la Operación No Están Solos en su segunda fase de limpieza que lanzó el presidente Juan Orlando Hernández este domingo desde el Valle de Sula.
La maquinaria ingresó a la zona en las primeras horas de la mañana de este lunes; con volquetas, retroexcavadoras y otro equipo pesado se trabajará para dejar limpias las zonas afectadas.
El funcionario dijo que “uno de los problemas que hemos tenido es el clima y sigue lloviendo y se anuncia, y aprovecho para que toda la gente del Valle de Sula estén pendientes, que según Copeco viene una crecida de dos a tres metros del río Chotepe, que viene de occidente”.
“Hoy comenzamos a sacar la basura grande, colchones, muebles, refrigeradoras, porque ya no trae más que lodo”, dijo refiriéndose a la anunciada crecida.
Mañana, si no sigue lloviendo, “vamos a empezar el operativo hasta dejar limpia Villanueva, Pimienta, La Lima, Potrerillos, y todo aquel municipio que solicite el apoyo al Estado”, indicó Pineda.
Estas acciones se hacen en conjunto con los alcaldes, por lo que Pineda dijo que están a la espera de que el alcalde Armando Calidonio les diga qué zonas de San Pedro Sula necesitan esta intervención.
Intenso trabajo y veeduría
Pineda dijo que para sacar los escombros se han destinado 100 unidades de aquí al miércoles solo para La Lima”.
Y además dijo: “Aprovecho para pedirle a aquel microempresario que tenga máquinas que nos preste y se le va a pagar con los precios establecidos por la Cámara Hondureña de la Industria de la Construcción (Chico) .
El funcionario solicitó la veeduría de estas acciones de los alcaldes e iglesias porque se le está apostando a la transparencia y a que las acciones lleguen donde más se necesitan.
Reiteró que “todos los que viven en la Planeta y en todas las zonas inundadas deben tener cuidado”.
Con esta operación inmediatamente salieron numerosas volquetas cargadas de desechos.
Después de este proceso viene la rehabilitación, que es donde los habitantes que fueron damnificados serán contratados por dos o tres días y se les pagará 250 lempiras diarios para que dejen sus casas totalmente habitables, pintadas, y luego se les dotará de los paquetes básicos de enseres domésticos.