Kim Kardashian se encuentra en Costa Rica tomando unas vacaciones, allí brillaron sus famosos glúteos gracias al mini bikini negro que utilizó la socialité.
Kim demostró que su arduo trabajo en el gimnasio había dado sus frutos, luciéndose en un traje de baño increíblemente pequeño con mucha abertura que cubría al mínimo su cuerpo, este también tenía un corte muy alto en la parte inferior y la espalda y el frente estaba cortado.
Por supuesto los paparazzis no pudieron perder la oportunidad de fotografiar a la esposa de Kanye West mientras disfrutaba de sus vacaciones a bordo de un yate.