San Pedro Sula.- Transmitir historias de amor es un privilegio que pocos tienen, y más aún cuando Farah La Revista ha sido testigo de momentos inolvidables, que con la complicidad de los protagonistas, se convierten en más que una narración de vida, sino más bien un retazo de los corazones involucrados en el fascinante relato de esta edición: La boda de César y Kimberly…dos jóvenes enamorados que se conocieron en el 2010, gracias a Michael James, un amigo en común, quien los presentó sin imaginar que formaría parte de un encuentro eterno y absolutamente mágico.
Al cierre del veraniego mes de junio, César y Kimberly decidieron darse el “sí, quiero” después de una relación de seis años. El Centro de Convenciones del Hotel y Club Copantl fue el telón de fondo de la ansiada pregunta con la que Kimberly había soñado tantas veces. Su pedida de mano cobró un sentido mucho más especial, puesto que el 19 de agosto pasado, ese mismo y mágico lugar eclipsó la celebración de las bodas de plata de sus suegros ¡todo en la misma noche!
Tras la ceremonia celebrada por el pastor Derick Hulse en el lobby de los salones Emperador, y una vez pasados los nervios, se marcharon a realizar el reportaje fotográfico en los hermosos escalones de la estancia bajo la cámara de Farah La Revista, mientras los invitados disfrutaban del aperitivo. La recepción postboda siguió en el espacio de los salones Napoleón, donde no faltó de nada: las refinadas entradas y banquete, la mejor música sonada por Golden Pro, baile, candy bar, y ¡mucha diversión!
Sin duda, todo fue posible gracias al profesionalismo de Alexandra Lockmer, que con su planeación y organización, siguió al pie de la letra los gustos y peticiones de los novios, haciendo de su boda la noche más especial de sus vidas. El recinto fue ataviado con ese toque excepcional y glamuroso que en cada obra decorativa genera Alexandra, esta vez, armonizando cascadas de cristales, candelabros y pedestales dorados, que culminaban en una exquisita apuesta floral mezclando tonalidades cálidas y rosa entre verdes follajes. El broche final lo dio la elegante mantelería y el servicio personalizado para cada uno de los invitados, reflejando la perfecta distribución de los espacios.
Tanto la pareja, como los selectos invitados, lucieron espectaculares con sus mejores galas; César vistió con un look distinto al clásico traje de novio: pantalón oscuro, una exótica chaqueta en nude que adquirió exclusivamente para la ocasión durante su viaje a China y, como broche de oro, un precioso corbatín que combinó perfectamente con sus zapatos de charol Salvatore Ferragamo de su colección de lujo. Ella, despuntó con un precioso vestido corte princesa de la casa de Ines Di Santo, y una romántica tiara de swarovski. Kimberly confió en Bridie Zoar, quien brindó un maquillaje sensacional a sus finas facciones, complementando su imagen nupcial con un semirecogido que Doris Chávez obró para su gran noche.
De la fantástica noche en que César García y Kimberly Ramos concretaron su amor ante su iglesia y sus más queridos, fue testigo el lente fotográfico de Farah La Revista, que con su profesionalismo capturó imágenes puras y llenas de luz, en un reflejo nítido del encuentro de dos almas conscientes de un amor intenso y sincero, confirmando así que “Lo que Dios unió…no se puede separar”…
Por: Dayana Ortiz