San Pedro Sula.- De cada enlace, Farah la Revista se lleva algo…cada uno tiene algo especial… pero, en este caso, fue la desmedida complicidad que había entre los novios la que inspiró el relato de esta magnífica historia de amor que tiene sus inicios cuando ambos estudiaban en la secundaria de La Salle. Fue la complicidad misma de 2 amigas en común la que originó el encuentro entre estos jóvenes que culminaría en un romántico noviazgo 6 meses después.
Aunque David –el protagonista de este relato– ya había cruzado miradas con Kimberlyn en la iglesia a la cual asistían, fue hasta darse cuenta que uno de sus mejores amigos era el primo de la chica de sus sueños, que comenzaron las menudas conversaciones a través del messanger. Y, así fue el hilo conductor que los llevó a compartir 10 años de momentos inolvidables hasta llegar a la firme determinación de concretar su compromiso matrimonial.
Teniendo como telón de fondo el Cerro Azul Meambar, localizado en la reserva natural protegida Panacam, estos amantes de la naturaleza y espíritus aventureros, dieron un giro a su historia el 29 de abril del 2017, cuando el apuesto joven se puso de rodillas, y con anillo en mano, le hizo la propuesta de su vida a Kimberlyn. El perfecto escenario resultó ideal para que ella respondiera con un “Sí, quiero” que terminaría lazando sus corazones en un compromiso inolvidable.
El 14 de julio de 2018 fue la fecha elegida para su enlace nupcial, una celebración increíble de estilo clásico, muy elegante con toques llenos de romanticismo. Todo empezó con una ceremonia religiosa oficiada por el padre Juan Fernando Serrano Membreño en la iglesia Nuestra Señora de Suyapa, ambientada magistralmente para la ocasión. Fue una boda muy íntima con la gente más cercana de David y Kimberlyn. Así, pudieron disfrutar con todos ellos de su gran noche sin formalidades, en un ambiente tranquilo lleno de momentos emotivos y risas.
Las mejores escenas en la boda de David Orellana y Kimberlyn Ulloa, capturadas con la creatividad y talento de Gerson Sagastume.
A continuación, se encaminaron a los salones Napoleón del Centro de Convenciones del Hotel y Club Copantl, donde los esperaba el coctel de bienvenida y el aperitivo, compartiendo así el refinado catering que dispuso la casa hotelera para todos. Solo al llegar, los invitados pudieron admirar la espectacular decoración que predominó durante la recepción postboda al estilo “Garden and Golden Rose”, que entre agapantos, orquídeas, rosas, verdes follajes y burbujas de cristal, elevaron la personalidad de los novios en un montaje fuera de serie diseñado exclusivamente por Elías del Cid, quien no escatimó su talento creativo para concretar una recepción que desbordaba glamour y buen gusto en el amplio sentido de la expresión.
Al son de “All of me” en la voz de John Legend, los recién casados ingresaron al recinto de celebración para bailar su soñado vals…solos en la pista central unieron aún más sus corazones, reflejando sus más profundos sentimientos y emociones a flor de piel. La brillante amenización musical de Cris Davis caracterizó la fiesta nupcial de esta pareja de enamorados que apostó por una velada excepcional donde el encanto de su amor y la diversión ¡estuvieron asegurados!
Para su “sí, quiero”, Kimberlyn apostó por un ajuar de la firma Alegria’s Bride, eligiendo un sensual traje de novia de corte sirena con encajes en blanco y efecto tatoo en la blusa, un tocado de swarovski –que remató su recogido bajo– y su velo catedral. Combinó las piezas estrella de su look con unos zapatos Steve Madden, y cumpliendo la tradición de “algo viejo, algo nuevo, algo prestado y algo azul”, la novia usó sus tacones con un detalle de ese color en la plantilla de estos ¡un detalle excepcionalmente curioso!
Su bouquet de novia en tonalidad rosa-naranja y nude, armonizó a la perfección con toda la decoración del recinto, reflejando así su toque personal. Por su parte, David se enfundó un clásico smoking en color oscuro hecho a la medida por sastrería Charlie, conjuntado con camisa blanca de etiqueta, chaleco negro asedado y sobrio calzado.
Para Farah La Revista fue un lujo retratar cada instante de la boda entre David Orellana y Kimberlyn Ulloa, corroborando el “feeling” entre ambas partes y realizando imágenes con mucha coherencia y gusto. Gracias a Gerson Sagastume –videógrafo responsable del enlace– y el lente fotográfico de Samuel Romero, estos novios conservan el mejor recuerdo de su matrimonio ¡Con la luz y el enfoque más oportuno, narran la felicidad que se respiró en cada esquina!
Por: Dayana Ortiz
Fotografías: Samuel Romero