San Pedro Sula.- La época de universidad siempre es una temporada inolvidable en la vida todo estudiante, y más aún en el caso de Elena, ya que fue cuando conoció a Óscar. Precisamente en el micro autobús que los trasladaba de Puerto Cortés a San Pedro Sula…Allí fue donde todo empezó. El inicio de una increíble relación que les llevaría a viajar y a vivir millones de mágicas experiencias.
La chispa que surgió 3 meses después de conocerse, se mantuvo viva durante 10 años de romántico noviazgo…y aunque ella se graduó de médico y él de ingeniero civil, evidentemente compartieron su complicidad en algo más que sus carreras profesionales, por lo que defienden que el cruce de sus caminos no fue casualidad.
Cuanto más se conocían, más sabían que estaban hechos el uno para el otro. Apostaron por un enlace muy a su medida y no podía ser en otro escenario que los salones Napoléon del Centro de Convenciones del Hotel y Club Copantl. Inspirados en un estilo tradicionalmente elegante, confiaron a Doris García cada uno de los detalles decorativos del recinto de celebración, que entre delicados candelabros de cristal, fina mantelería de impecable blanco con destellos en oro y flores naturales que acentuaron pinceladas en rosa, vistieron con encanto la mágica fiesta postboda.
Prometieron pasar el resto de sus vidas juntos en el altar de la iglesia El Buen Pastor, mientras el padre Henry Asterio Rodríguez oficiaba la ceremonia consagrada que contó con momentos especialmente emotivos e inesperados, y a muchos se les escaparon las primeras lágrimas de emoción aunque, obviamente, a quienes más les movió el corazón fue a los padres de los novios. Irela Pérez dispuso de su entera experiencia y profesionalismo como wedding planner de este mágico evento nupcial.
La bella Elena se decantó por un modelo de la casa Novias de Blanco: de inspiración bohemia y corte asirenado con volantes escalonados, mostrando un precioso efecto ilusión a la altura de los costados del torso como señal de discreta coquetería. Su outfit nupcial se complementó con un espectacular velo catedral que realzaba su brillante cabellera en un recogido de Mónica Canales, ¡y por supuesto! sus zapatos de tacón Steve Madden con brillantes destellos en plata. Óscar, en cambio, escogió un traje línea exclusiva del colombiano Alexander Baute, de color azul intenso que conjuntó con un tono más claro. El punto distintivo fue el atrevido y elegante contraste que reflejó su esencia personalizada. Sus cómodos zapatos Hush Puppies no podían faltarle ¡Estaban guapísimos!
Un enlace lleno de magia y envuelto de naturaleza espontánea, que consiguió crear momentos únicos e inolvidables en torno a todos los selectos invitados, y que con la complicidad de Farah La Revista fantástico dejó plasmados los recuerdos en magníficas imágenes repletas de luz que evidencian la boda de Elena Isabel García y Óscar Delgado… dos almas porteñas seguras de que el destino existe…
Por: Dayana Ortiz
Fotografías: Samuel Romero