San Pedro Sula.- Ocurrió en el lugar, el día y la hora predestinada. Johana y Gabriel se conocieron al asistir a una fiesta de amigos en común; 5 meses después fueron novios, retando sus corazones a iniciar una relación que jamás imaginaron culminaría en un enlace tan minimalista como impecable que dejó ver la absoluta exquisitez de los novios.
La Iglesia Nuestra Señora de Suyapa lució impecable, mostrando una apuesta floral en blancos sobre verdes follajes que parecían realzar como telón de fondo la alfombra roja por donde Johana y Gabriel desfilaron para encontrarse ante el altar.
La ceremonia fue oficiada por el hermano del novio, el reconocido sacerdote Henry Asterio Rodríguez, quien además logro erizar la piel de los selectos invitados al dedicar a los novios una romántica pieza musical en compañía de las voces de Claudia González y Andrés Paredes.
Los salones Napoleón del Centro de Convenciones del Hotel y Club Copantl fueron ataviados con finos cortinajes en blanco y gris, como parte del diseño y montaje de Alexandra Lockmer en la gran noche de bodas de los Rodríguez-Enamorado.
Jackie Cabrera ejecutó la planeación de Alexandra para engalanar la estancia con la apuesta floral natural que armonizó orquídeas, dragón y hortensias sobre hiedra y eucalipto, complementando el concepto con elegantes detalles en silver, sin caer en los excesos ¡perfecto!
La puesta en escena fue invadida por un aire retro en la atmosfera, y combinando elementos en plata y bases de espejos que reflejaban el brillo de la mantelería, el montaje se mostró como anillo al dedo en cada rincón del recinto.
Cada instancia del protocolo nupcial en la fiesta postboda se cumplió a cabalidad, y los selectos invitados se llevaron los mejores recuerdos de la velada nupcial de Johana y Gabriel ¡delicioso pan y café! Producidos por las familias de los novios en Olancho y Lempira…originales.
Mientras Cris Davis interpretaba su amplio repertorio musical, la romántica magia entre los recién casados los llevó a lucir en infinita conexión de sus almas y outfit nupciales, mostrando un estilo personalizado que se dejó palpar desde el primer vistazo.
Johana se decantó por un modelo exclusivo de David´s Bridal, una pieza de línea A diseñada en tul rebordado que conjuntó con su velo catedral de orillas en encaje y fina pedrería. El hermoso bouquet en cascada brindó el toque glamuroso a su imagen de novia enamorada.
Confió su apuesta beauty a Mely Torres, quien esculpió sus delicadas facciones y a Irma Rodríguez, el estilismo de su hermosa cabellera. Gabriel no se quedó atrás, su porte indiscutible de elegante caballero lo llevó a elegir un frac de tono clásico que lució con sus zapatos de charol, cumpliendo con la etiqueta de gala…impecable.
Minimalista, impecable, sin excesos, y por supuesto ¡inolvidable! así fue la boda de Mirian Johana Enamorado Ayala y Gabriel Arturo Rodríguez Romero…un encuentro predestinado en una mágica y fascinante noche.
Por: Dayana Ortíz
Fotografías: ElDiarioHN y Roman Valle