San Pedro Sula. – El amor entre este caballero inglés y esta joven hondureña nació de manera impredecible, puesto que se conocieron el 2016 en Santa Rosa de Copán por una amiga en común. Jordan Reynolds había venido a Honduras como maestro de intercambio y al conocer a Norma Green, sintieron una atracción en común, ya que los unían muchas cosas, entre ellas la pasión de viajar.
Tras iniciar un noviazgo formal desde hace más de 5 años, determinaron juntar sus vidas el pasado 30 de agosto. Fue una boda en la que predominó el amor al unir a dos culturas, Norma y Jordan se unieron en matrimonio bajo la religión cristiana evangélica.
Los novios apostar por un enlace que tuviera como locación la ciudad natal de Norma, San Pedro Sula. Así, y después de visitar varios lugares, buscando la estancia que cumpliera con sus expectativas, concluyeron que sería el Hotel Intercontinental el lugar idóneo, para una boda intima, con sus familiares que viajaron desde Reino Unido, Estados Unidos y Guatemala.

Muy emocionados, Anthony y Janeth Reynolds, al igual que Norma Robles siguieron paso a paso el enlace religioso de sus hijos que fue oficiado por el pastor Andrés Green, padre de la novia, siendo los padrinos Dowglas Aguilar y Ángela Green.

Tras la ceremonia e intercambio de votos matrimoniales, el protocolo de rigor como el primer baile como esposos y el tradicional brindis, se ofreció un elegante banquete, donde Jackeline Cabrera fue artífice de la decoración que combinaba de forma excepcional con los cortinajes de chiffon en blanco y una apuesta floral delicada con un sutil toque de glamour.
Los padres de la novia recibieron afectuosamente a la familia cercana del novio y algunos amigos, que viajaron desde Londres para estar presentes en uno de los momentos más importantes en la vida de Jordan.
Los ahora esposos, mostraron su carisma y buen humor al compartir fraternalmente con los amigos y familiares del joven matrimonio que ahora conforman los Reynolds-Green.
Fotos: El Diario HN