San Pedro Sula.- Oswaldo y Fabiola se conocieron bailando, y además de verdad. Al ritmo del popular programa televisivo “Bailando por un Sueño”, esta pareja de enamorados acabaron haciendo de su experiencia la excusa perfecta para verse y construir su mágica historia de amor. La complicidad en la pista cruzó fronteras: ¡hasta el altar!
Única. Así es esta pareja. Oswaldo y Fabiola se hicieron novios hace 6 años… ¡y su amor se volvió único! La joven nunca imaginó cuánto cambiaría su vida, porque sí, Oswaldo acabó convirtiéndose en su compañero de pasos y figuras… y, finalmente, en su gran amor. Inevitablemente, y gracias a la música y la complicidad que transmitían sus miradas, ambos comenzaron una historia ¡fuera de serie!
Jóvenes, divertidos e ¡indescriptibles! Dos personalidades únicas que decidieron dejar de lado cualquier protocolo establecido… también en su boda. Oswaldo y Fabiola soñaban con unir sus caminos a través del matrimonio, pero su idea iba más allá del clásico “sí, quiero”, Por ello, decidieron apostar por la celebración de un enlace desenfadado, una auténtica fiesta en la que la idea de celebrar su amor y compartirlo con sus más queridos era lo único que debía importar.
Dividiendo su gran noche en dos espacios, la pareja se decidió por la Parroquia La Santa Cruz para darse el “sí, quiero” en una ceremonia de carácter religioso. Un momento emotivo e ¡inolvidable! La fiesta postboda tuvo lugar en Expocentro, donde la estancia se convirtió en su perfecto telón de fondo. Entre otros, su primer baile ya como marido y mujer cobró gran sentido, pues así se conocieron… bailando. Por supuesto, el mundo se paró ante sus pies, en un instante en el que la pareja apostó por un vals ¡Un recuerdo único!
Basándose en un estilo muy personalizado, así como colorido, cómodo ¡e indudablemente único! Su enlace se caracterizó por celebrarse en pleno abril, y por estar cubierto por un sinfín de colores; desde el verde, pasando por el verde, magenta, Rosa y blanco, fueron esenciales en cada rincón. No podía ser otro el lugar escogido para esta “fiesta” tan especial planeada y coordinada por Nolvia Mejía de Ambientes Elegantes ¿El resultado? La muestra clara de que en la personalidad reside la auténtica belleza.
Siguiendo su estilo y basándose en la misma filosofía que habían plasmado en la decoración de cada rincón de su “sí, quiero”, los novios lucieron ¡completamente auténticos! Fabiola, fiel a su personalidad, apostó por lucir un precioso vestido exclusivo de Marisabel Medina Galo ¡Una belleza! El maquillaje y peinado de Melissa Gudiel realzó sus finas facciones, mientras que como zapatos, eligió unos Converse Rosa, el toque de color que acompañó a su fantástico bouquet de novia y que hizo juego con los tennis de Oswaldo ¡Fuera de serie! Por su parte, él se decantó por un traje gris y camisa blanca; esta vez, el detalle de color en su look lo aportó el chaleco y corbatín rosa, a juego con el ramo de la novia.
Si una boda siempre es difícil de olvidar, ¿qué sucede cuando esta viene acompañada de originalidad, naturalidad y diversión? El “sí, quiero” de Oswaldo Salinas y Fabiola Guillén se convirtió en uno de esos acontecimientos que quedan guardados siempre en el recuerdo… en la retina, en el corazón y en fotografías llenas de magia. Cada detalle del fantástico reportaje nupcial que realizó Farah La Revista en esa gran noche, fue una huella imborrable que hoy compartimos con nuestros seguidores.
Por: Dayana Ortiz
Fotografías: Samuel Romero
