Rober Kiros Habte participó de las pruebas de clasificación de los 100 metros libres masculinos donde llegó en último lugar.
La comentada actuación del nadador etíope Robel Habte, último de las series de 100 metros en estilo libre en los Juegos Olímpicos de Río, sigue siendo motivo de polémica.
Habte, quien llamó la atención por su mal estado físico y que fue apodado por la prensa internacional como “Robel la ballena”, provocó una polémica no menor en su país.
En Etiopía su actuación no fue recibida precisamente con una sonrisa y muchos recordaron que Robel Habte es hijo de Kiros Habte, el presidente de la Federación Etíope de Natación, disparando las especulaciones sobre la cuestión de que pudo beneficiarse de ese parentesco para lograr estar en Rio-2016.
Es el “símbolo” del “favoritismo y de la incompetencia que estamos combatiendo”, estima Lina T., una habitante de Adís Abeba, en su cuenta de Twitter, haciendo referencia al movimiento de protesta antigubernamental violentamente reprimido en las últimas semanas en Etiopía.
Habte también es apuntado por haber sido elegido como el abanderado de su país, pese a que la delegación de Etiopía cuenta con atletas de fondo y medio fondo de prestigio mundial.