El comisionado de la Policía Nacional, Leandro Osorio, declaró este viernes que nunca ha matado a nadie y el único mal que hizo fue hacer bien su trabajo. Así se expresó luego que se le notificara la noche del pasado jueves su cancelación por parte de la Comisión Especial para el Proceso de la Depuración y Transformación de la Policía Nacional.
La comisión depuradora canceló de sus cargos a los comisionados, Leopoldo Flores Milla, Elder Madrid Guerra y Leandro Osorio Santos, por el proceso de reestructuración de la Policía Nacional. De igual forma suspendió a los comisionados generales, Ricardo Ramírez Del Cid y Ramón Sabillón Pineda, por se mencionados en el informe en el que se implica a varios altos oficiales en el crimen de Julián Arístides González.
Por último ratificó en sus cargos a los comisionados Héctor Iván Mejía, Quintín Antonio Juárez y al actual director general de la Policía Nacional, Félix Villanueva. “Todavía no he aceptado mi cancelación, ni he firmado nada, voy a hablar con mis abogados para ver qué es lo que me conviene”, aseguró.
Añadió que en todos los cargos a los cuales fue asignado siempre dio resultados y que el único mal que hizo fue hacer bien su trabajo. Respecto a si tuvo participación en la muerte de Alfredo Landaverde y Julián Arístides González, fue claro al asegurar que “jamás he matado a nadie, el único mal que he hecho es hacer bien mi trabajo y levantar algunas instituciones en las que estuve”.
“No tengo nada de qué avergonzarme; ese informe divulgado tiene falta de veracidad y que sean los sistemas de investigación que determinen eso, pero que dejen de enlodar la institución policial que es noble”, indicó. El pasado 4 de abril, trascendió una serie de documentos en los que se revela cómo se planificó el asesinato de los zares antidrogas y quiénes estarían directamente implicados.
Osorio aseguró que “hay estructuras y hay gente que no le interesa que Leandro Osorio continúe en la institución, ya tenían todo planeado, hasta el comunicado”. Recordó que “en mis 32 años de servicio, el tiempo más difícil que pasé fue en el 2009 por quienes hicieron la fiesta y los que se encargaron de limpiar la cocina fuimos nosotros”. “Nosotros evitamos que hubiera derramamiento de sangre en Honduras”, aseguró.
Dijo que por los momentos está analizando con su familia que es lo que mejor le conviene, porque ayer luego que lo llamaron para una reunión, la comisión depuradora le canceló. “Soy una persona honorable, con 32 años de trayectoria, tengo la frente en alto y me he desempeñado en puestos de importancia para el país”, destacó.
Insistió que “no soy ningún delincuente, ni tampoco me sacan por la puerta de atrás y me hacen a un lado por hacer bien mi trabajo, por no cumplir una agenda que ya tenían anticipado algunos autores”. “Estoy tranquilo y sereno, les aseguro a mi familia a mis amigos y a toda Honduras que yo no tengo nada que ver en crímenes”, enfatizó. La comisión depuradora solicitó el pasado 14 de abril del presente año, a través de un comunicado la información de nueve oficiales que serán investigados.