Washington. – Los legisladores republicanos estadounidenses anunciaron haber llegado a un nuevo acuerdo para evitar el cierre del Gobierno, cuya negociación para impedirlo se ha complicado tras la presión ejercida por el mandatario electo, Donald Trump.
«La recién acordada Ley de Ayuda Estadounidense de 2024 mantendrá abierto el Gobierno, financiará a nuestros Grandes Agricultores y a otros y brindará ayuda a aquellos gravemente afectados por los devastadores huracanes», anunció el propio Trump en su red social, Truth Social.
El presidente del Comité de Apropiaciones de la Cámara Baja, Tom Cole, había avanzado a la prensa que se había cerrado una alternativa que desde ese partido se considera un «paso adelante razonable», a un día de que en la medianoche del viernes al sábado se cumpla el plazo.
La mayoría republicana de la Cámara de Representantes y la mayoría demócrata del Senado habían alcanzado un acuerdo el martes para dotar al Gobierno de nuevos fondos y evitar el cierre administrativo antes.
Ese proyecto de ley bipartidista y de poco más de 1.500 páginas ampliaba el plazo hasta el 14 de marzo para dar más tiempo a negociar esos presupuestos, pero el miércoles se tumbó por parte de Trump haciendo que la negociación volviera a la casilla de salida.
Trump y su aliado Elon Musk, encargado de recortar el gasto en burocracia del próximo Gobierno, se oponen a varias disposiciones y exigen suprimir el techo de la deuda.
Condiciones de Trump a Mike Johnson
El miércoles, el presidente electo vinculó la reelección del republicano Mike Johnson como presidente de la Cámara de Representantes a que este cumpla con sus exigencias al respecto y prefirió llegar a un cierre del Ejecutivo antes que aceptar concesiones frente a los demócratas.
«Es mucho mejor para nuestro país cerrar por un tiempo que aceptar las cosas que los demócratas quieren imponernos. (…) Tuvimos una victoria abrumadora hace solo cuatro semanas y no vamos a permitir que los demócratas lo olviden tan rápidamente», dijo antes de que los partidos de su formación cerraran el plan alternativo.
El acuerdo sobre la financiación del Gobierno debe ser aprobado por las dos cámaras parlamentarias. El eventual cierre implica enviar a casa sin trabajo ni sueldo a cientos de miles de empleados públicos y la paralización de multitud de servicios.
Desde 1976, cuando se aprobaron nuevas leyes presupuestarias, la Administración estadounidense se quedó sin fondos en unas 20 ocasiones, aunque la mayoría de veces ha sido solo durante un día.
Con información de EFE
