BOGOTÁ, COLOMBIA.- El máximo jefe de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), Rodrigo Londoño Echeverri, está en cuidados intensivos en una clínica de Villavicencio (centro) luego de sufrir un “accidente cerebral isquémico transitorio”, informaron fuentes médicas.
Según el primer reporte médico de la clínica Cooperativa de Villavicencio, luego de las valoraciones médicas a Londoño se diagnosticó un “accidente cerebral isquémico transitorio” por lo cual “se ha iniciado el tratamiento médico pertinente”.
La información agrega que la evolución del paciente “ha sido satisfactoria con una mejoría de 90 %. El paciente continuará bajo observación médica de manera preventiva en la unidad de cuidado crítico”.
Alias “Timochenko”, según el parte médico, ingresó de urgencia a las 08.02 hora local (13.02 GMT) por “un cuadro clínico de aproximadamente 5 horas de evolución consistente en disartria ligera (alteración del habla) y monoparesia leve de miembro superior (brazo) izquierdo (disminución de la fuerza muscular)”.
Por su lado, el secretariado de las FARC en un mensaje leído por Félix Antonio Muñoz Lascarro, alias “Pastor Alape”, señaló que:
El estado de salud de nuestro máximo dirigente, Timoleón Jiménez (como también se le conoce a Londoño), es estable y satisfactorio”.
Igualmente agradecieron “la solidaridad expresada de manera inmediata por diversas organizaciones y personas”.
Desde su regreso de Cuba a Colombia, a finales de mayo pasado, Londoño no había tenido problemas de salud.
En una entrevista publicada hoy por el diario El Espectador, “Timochenko” reconoció que tenía “la maquinaria un poco desgastada” por los agites de su nueva vida.
Desde 2015 a la fecha, Londoño ha tenido varios quebrantos de salud. Hace ocho meses fue hospitalizado en Cuba para recibir tratamiento coronario, situación que fue catalogada por los miembros del secretariado de las FARC como un “susto” que no pasó a mayores.
El presidente colombiano, Juan Manuel Santos, y “Timochencko” encabezaron el martes pasado en el caserío de Mesetas, en el departamento del Meta (centro), el acto final de la dejación de armas por parte de esa guerrilla que hace su tránsito a la vida civil.