VALLEGRANDE. – Miles de personas se reunieron el lunes en el pequeño pueblo de Bolivia, donde hace 50 años el mítico líder de la revolución cubana Ernesto “Che” Guevara fue enterrado en una fosa común tras haber sido fusilado por soldados del país sudamericano apoyados por la CIA.
El presidente boliviano, Evo Morales -un líder izquierdista indígena-, encabezó el homenaje al que asistieron unas 10 mil personas, según el Gobierno.
En el acto participaron familiares de Guevara y exguerrilleros que acompañaron al Che en sus luchas armadas contra gobiernos dictatoriales en América Latina.
Cincuenta años después, el legado de Ernesto Che Guevara vive en los jóvenes, en su lucha inclaudicable por la igualdad y liberación de los pueblos”, escribió Morales en su cuenta de la red social Twitter.
50 años después, el legado de Ernesto Che Guevara vive en los jóvenes, en su lucha inclaudicable por la igualdad y liberación de los pueblos pic.twitter.com/RPkBcovMtg
— Evo Morales Ayma (@evoespueblo) 9 de octubre de 2017
El 8 de octubre de 1967, el Ejército boliviano -con ayuda de fuerzas estadunidenses- capturó a Guevara tras una batalla en la selva en medio de su intento de expandir la revolución cubana por América Latina.
Al día siguiente fue ejecutado en la localidad de La Higuera, a unos 60 kilómetros de Valieran.
Pero el destino de sus restos se mantuvo en secreto durante décadas.
Recién en 1997 fueron exhumados y llevados a un mausoleo en Cuba, donde están en exhibición junto a los de otros combatientes que lucharon a su lado en la isla caribeña.
Nacido en Argentina, el médico Guevara se unió a Fidel Castro en México, desde donde en 1956 partió la expedición que culminaría con la victoria armada sobre el dictador cubano Fulgencio Batista poco más de dos años después.
En los días previos al homenaje, Vallegrande fue escenario de foros de debate y exposiciones artísticas que culminaron en la mañana del lunes con danzas folclóricas bolivianas en las que participaron Morales y sus invitados especiales.