Las leyendas de la NBA Shaquille O’Neal, Allen Iverson y Yao Ming encabezaron al grupo de 10 personas que ingresaron el viernes en el Salón de la Fama del Básquetbol, en una ceremonia realizada en Springfield, Massachusetts.
O’Neal puso la nota alegre al compartir anécdotas y más que un discurso de agradecimiento su intervención fue una charla relajada y un relato de sus mejores momentos en la NBA.
Campeón de la NBA en cuatro ocasiones, tres con Los Angeles Lakers y una con Miami Heat, rindió tributo a las leyendas que figuran en el Templo de los Inmortales y dijo: “Es un gran honor ser parte de esta gran fraternidad”.
Citó entre ellas a Julius Erving, el icónico “Dr. J”, y admitió que “siempre soñé con ser tan bueno como el Dr. J.”
O’Neal señaló que pasó tres años pensando que Yao no podía hablar inglés, y luego quedó deslumbrado cuando la estrella asiática habló agradeciendo su ingreso al Salón.
Iverson trató de contener las lágrimas durante su prolongado discurso, en el que agradeció a John Thompson, su ex entrenador de la Universidad de Georgetown, por “salvar” su vida al ayudarlo a ser mejor jugador.
“Me imaginaba esto durante mucho tiempo”, dijo Yao Ming, el gigante chino que se convirtió en el jugador más alto en la historia del pabellón de la fama, con 2.29m de estatura.
Yao, quien promedió 19,2 puntos y nueve rebotes para los Rockets de Houston, se convirtió en un embajador mundial para el deporte durante sus ocho temporadas en la NBA. Ha continuado la promoción del juego después de que se vio obligado a retirarse en 2011 por recurrentes lesiones en los pies.
“Siempre recordaré mis tiempos pasados con los Rockets de Houston como algunos de los mejores momentos de mi vida”, dijo Yao.
En la Clase 2016 figuran también la ex basquetbolista Sheryl Swoopes, de la WNBA, el entrenador Tom Izzo y Jerry Rinsdorf, el dueño de los Chicago Bulls que ganaron seis campeonatos de la NBA en la era de Michael Jordan.
También ingresaron como homenajes póstumos Darrel Garretson, quien fue árbitro de la NBA durante 27 años; John McLendon, primer entrenador afro-estadounidense en una liga profesional; Zelmo Beaty, entrenador que brilló en la liga universitaria y luego en la NBA y la ABA, y Cumberland Posey, quien es también miembro del Salón de la Fama del Béisbol.