El oficial de policía Héctor Caballero se apersonó este lunes a las instalaciones del Comisionado Nacional de los Derechos Humanos (Conadeh), para solicitar protección luego que saliera vinculado en las muertes de los zares antidrogas.
Caballero negó rotundamente haber participado en la planificación y ejecución de los asesinatos de Julián Arístides González y Alfredo Landaverde. “Aquí estoy, dando la cara porque yo no tengo nada que ver en eso”, dijo el subcomisionado de policía.
Señaló que se da cuenta que está siendo implicado en los crímenes el fin de semana, cuando su nombre aparece en un medio de comunicación internacional. “Nunca me investigaron, ni me llamaron a declarar; por qué no presentaron pruebas en ese momento”, cuestionó el uniformado.
El oficial de policía calificó los señalamientos como una trama, para dañar a personas inocentes y proteger a los verdaderos culpables. “El fin de semana me sentí preocupado, porque pueden hacer cualquier cosa, como decir a ese lo mataron porque era jefe de los sicarios”, agregó.
De acuerdo a las investigaciones, Caballero, a través de llamadas telefónicas, dirigió a los gatilleros que le quitaron la vida a Alfredo Landaverde. Lo anterior se sustenta en los vaciados telefónicos, realizados durante la investigación, la cual salió publicada en The New York Time con perfiles y datos.
“Temo por mi vida por eso vengo acá, no tuve ninguna relación, ni mi teléfono, estoy seguro que muchos oficiales que se mencionan allí ni me conocen”, acotó. Recordó que el 1 de abril le notificaron su separación del cargo como jefe de la Dirección de Investigación Policial (DPI) de La Ceiba, zona caribeña de Honduras.
A su criterio, su destitución del puesto laboral demuestra que las autoridades conocían detalles del informe, revelado por el periódico estadounidense.
INTERESES OSCURAS TRAS LA ACUSACIÓN
“No recibí órdenes de nadie, ni dinero de nadie. A saber qué intereses oscuros habrá detrás de esto y van a querer callar a mucha gente”, manifestó. Solicitó que la Misión de Apoyo contra la Corrupción e Impunidad en Honduras (MACCIH) investigue el caso, para esclarecer las muertes de los zares antidrogas.
“Que investiguen el caso y puedan dar con los autores materiales e intelectuales reales que ordenaron y ejecutaron los asesinatos”, exteriorizó. El 16 de abril The New York Time reveló las identidades de 54 miembros de la Policía Nacional que supuestamente mataron a los zares antidrogas.
En el informe aparecen tres generales, los cuales estarían ligados al narcotráfico, razón por la cual le dieron muerte a González y Landaverde. El cartel al que están siendo vinculados es el Atlántico, liderado por Winter Blanco y que operaba en La Mosquita.