Taipei, República de China.- Los presidentes de Honduras y de la República de China Taiwán han intercambiado este lunes sendas condecoraciones, como una muestra de amistad y hermandad entre los pueblos.
El intercambio se hizo durante un acto solemne en el Palacio Presidencial, como parte de la Visita de Estado que realiza el presidente Juan Orlando Hernández, quien encabeza una delegación del sector público y privado que busca nuevas oportunidades de negocios y de cooperación.
La presidenta Tsai Ing-wen impuso a su homólogo hondureño la Orden del Jade Brillante con Gran Cordón, por su valioso apoyo hacia la República de China Taiwán.
Tsai ha destacado los profundos lazos de hermandad y fraternidad que existen con el Gobierno y pueblo hondureño y ha saludado los esfuerzos que hace el país por transitar en la ruta al desarrollo económico y social.
“El presidente Hernández es uno de los amigos más sólidos que tenemos en el concierto de las naciones, así que esta nueva visita suya es un motivo de gran privilegio tanto para el Gobierno como para el pueblo de Taiwán”, manifestó.
“Me siento altamente honrada y feliz de ser condecorada por su Excelencia con la Orden Francisco Morazán en el Grado Gran Cruz Placa de Oro”, continuó.
Aseguró que la condecoración es un honor que pertenece a todos los taiwaneses porque esta presea simboliza no solo la amistad fraterna y estrecha de cooperación entre nuestras naciones sino también un anhelo de que sobre las bases fraternales sigamos luchando, fortalezcamos nuestra cooperación a fin de contribuir al incremento de nuestros lazos.
Tsai reconoció que “el Gobierno del presidente Hernández se ha caracterizado por fomentar sin temor las dificultades, el mejoramiento de la seguridad, el incremento del empleo, la dinamización de la economía de Honduras, el crecimiento notable en las inversiones, así como programas de justicia social tendientes a mejorar la calidad de su pueblo”.
“Como bien lo ha dicho Su Excelencia, Honduras está cambiando porque algo bueno está pasando; como país aliado y hermano quisiera en nombre del pueblo y Gobierno, expresarle la más sincera felicitación y mis mejores deseos para que estos múltiples logros de su gestión puedan tener mucho éxito”, enfatizó Tsai.
La “Orden de Jade Brillante” es la más alta distinción otorgada por la República de China (Taiwán). El jade es una piedra preciosa que simboliza el honor máximo al que va destinada la condecoración.
Orden Francisco Morazán
Por su parte, el presidente Juan Orlando Hernández ha impuesto a su similar la Orden Francisco Morazán en el Grado Gran Cruz Placa de Oro.
La Orden Francisco Morazán es la más alta distinción que otorga el Estado de Honduras. Su creación se estableció el 1 de marzo de 1944 como parte los homenajes del primer centenario de la muerte del héroe Francisco Morazán.
Esta orden se entrega a personas y representantes de la diplomacia nacional o internacional por sus eminentes servicios prestados, por importantes beneficios dispensados a la humanidad o por notorios méritos en el campo de la cultura.
Hernández ha destacado una historia de hermandad y amistad que se afianza a lo largo de 75 años.
El presidente hondureño fue el primero en saludar a la presidenta Tsai al ser electa por el pueblo en los comicios de enero pasado, lo que arrancó los aplausos de la concurrencia.
“Constituye para mí y la delegación hondureña que me acompaña, un verdadero honor y compromiso el haber sido considerado merecedor, por parte del Gobierno de Taiwán, para recibir la Condecoración de la Orden del Jade Brillante con Gran Cordón, que en esta ocasión he recibido de manos de su Excelencia Presidente Tsai”, dijo Hernández.
Manifestó que esta visita es de mucho simbolismo por ser esta la primera Visita Oficial de un país amigo a República de China (Taiwán), en el ejercicio del mandato presidencial de la presidenta Tsai.
“Con profunda emoción y ante las distinguidas personas que nos acompañan, agradezco tan invaluable muestra de fraternidad que permite, más que con mil palabras, transmitir la fuerza de la amistad, respeto y fraternidad, que han identificado los 75 años de buenas relaciones entre Taiwán y el pueblo hondureño”, expresó.
Hernández manifestó que en esta visita ha tenido la oportunidad de correr y ejercitarse en sus parques, transitar por el metro, visitar los museos, disfrutando así de la hospitalidad del pueblo de Taiwán.
“Reitero nuestra firme voluntad de consolidar los lazos bilaterales, como dos países identificados por su vocación democrática y de servicio en favor de su población”, concluyó.