El mandatario también instruye entregar al Ministerio Público toda la documentación existente sobre el caso y darle la colaboración para su esclarecimiento.
Tegucigalpa
El presidente Juan Orlando Hernández anunció hoy que giró instrucciones para la suspensión y puesta a la orden de la Fiscalía y de la justicia a los miembros de la Policía Nacional que participaron en el asesinato del titular de la Dirección de Lucha contra el Narcotráfico (DLCN) del Ministerio Público, Julián Arístides González Irías, en 2009.
En comparecencia de prensa en Casa de Gobierno, el mandatario detalló que “le giré instrucciones precisas al ministro de Seguridad (Julián Pacheco Tinoco) : todo miembro de la Policía Nacional, sea agente u oficial, que supuestamente sea responsable de haber participado en el asesinato del titular de la DLCN y que aparezca en el informe, debe ser suspendido de inmediato y puesto a la orden de la justicia”.
Agregó que, “de igual manera, debe de entregársele al Ministerio Público toda la documentación existente al respecto y para eso se tiene que asegurar cada uno de los expedientes existentes o documentos de soporte en cualquier institución u oficina del Poder Ejecutivo en particular la Secretaría de Seguridad y de la Policía Nacional”.
Hernández apuntó que esa medida se aplicará para que “de tal manera nadie podrá sacar información, sino más bien para entregarla al Ministerio Público, que es el encargado jurídicamente de llevar a cabo esta investigación”.
El presidente Hernández adelantó que “quien no lo haga o quien quiera burlar esta instrucción, o lo que la ley indica al respecto, debe ser puesto a la orden de los tribunales como manda la ley”.
“Así que total colaboración para con el Ministerio Público o cualquier entidad que esté investigando este proceso y cualquier otro, porque los policías deben de ser los primeros en dar el ejemplo como cualquiera de nosotros los servidores públicos”, acotó.
El mandatario indicó que este es un parteaguas en la historia del país y de la Policía Nacional.
El gobernante expresó que “confío en que los policías, agentes y oficiales estén a la altura del entendimiento de lo que hoy demanda la población”.
Advirtió que “quien no esté, que mejor se haga a un lado y que también los operadores de justicia vayan con toda la fuerza que requiera para poner en la cárcel a quienes no han cumplido con su deber”.
“Nosotros de nuestra parte hemos dado todo el respaldo estos dos años y desde que estaba en el Congreso Nacional el andamiaje jurídico en términos de confianza de recursos, en términos de voluntad política para lograr una Policía Nacional que genere confianza, que dé resultados, pero obviamente a la fecha de hoy falta mucho por hacer”, reconoció.
Sin embargo, el presidente Hernández destacó que ha encontrado elementos que han querido dar ese mejor resultado que demanda la sociedad.
“Pero, en ese sentido, hoy tiene que ser el momento de demostrar resultados; todo eso va a generar la confianza, de tal forma que las instrucciones están dadas y en ese sentido esperamos los mejores resultados en este proceso de investigación”, indicó.
El mandatario también resalto el “nuevo esquema de depuración y certificación policial” que espera se apruebe en el Congreso Nacional, el cual, consideró, debe estar “absolutamente blindado” para lograr los resultados que necesita la población.
Arguyó que “hemos demostrado, en el resto de las operaciones para ir recuperando la paz y la tranquilidad, que hemos avanzado bastante, claro que sí, y este no debe ser una tarea que se quede a un lado”.
El ex titular de la DLCN, Julián Arístides González, fue asesinado el 8 de diciembre de 2009 en el barrio Guanacaste de Tegucigalpa, por sicarios que se transportaban en motocicletas, crimen en el que se involucra a la cúpula policial de esa época, así como agentes de la escala básica.