Nueva York.- La primera dama hondureña, Ana García de Hernández, fue este martes la voz de las mujeres, niñas y adolescentes que migran, durante el panel de debate denominado “Mujeres y niñas en movimiento: una llamada a su protección”.
“No permitiremos que sus derechos sigan siendo vulnerados”, enfatizó la esposa del presidente Juan Orlando Hernández en el panel, que organizaron el Fondo de Población de las Naciones Unidas, la Misión Permanente de Dinamarca y el Consejo Danés para los Refugiados.
García de Hernández dijo que para algunas personas la migración parece un problema nuevo, pero en realidad la movilidad poblacional data de siempre.
“Me conmueve profundamente escuchar historias de nuestras compatriotas adolescentes que se ven forzadas a realizar un viaje de más de 3.500 kilómetros vía terrestre y son presionadas a pertenecer a pandillas; los líderes de las bandas criminales abusan y disponen de ellas sin su consentimiento”, lamentó.
Agregó que muchas mujeres migran para huir del abuso en el hogar, pero lastimosamente también son violadas en la travesía.
“Para muchas niñas y mujeres jóvenes, la migración es la única ruta para escapar de la opresión, el maltrato y en algunos casos mueren”, señaló.
García de Hernández dijo que la mayoría de historias pasan inadvertidas, por el miedo, la intolerancia y la discriminación que sufren muchas de estas niñas, jóvenes y mujeres, lo cual impide contar sus historias libremente.
Prevención de migración irregular
La Primera Dama enumeró algunas medidas que el Gobierno del presidente Hernández viene ejecutando desde 2014 para disminuir la migración irregular.
Destacó entre esas medidas la creación de la Subsecretaría de Asuntos Consulares y Migratorios para garantizar un mayor enfoque en la protección y atención de los migrantes en el exterior y los que retornan; la implementación de la Ley de Protección del Migrante Hondureño y la ejecución del Fondo de Solidaridad con el Migrante Hondureño (Fosmih), con una asignación de fondos nacionales de hasta cinco millones de dólares anuales.
Además, destacó que se abrieron tres centros de atención al migrante retornado, en los cuales se brindan servicios de alimentación, atención médica inmediata y psicológica, alojamiento por 48 horas para quienes no puedan retornar a sus lugares de origen, transporte y el llenado de una ficha socioeconómica para el seguimiento de los casos y proceso de reinserción de los hondureños a sus comunidades.
Durante el último año se han inaugurado 12 Unidades Municipales de Atención al Migrante Retornado (Umar), encargadas de la reinserción local de los migrantes retornados, especialmente las unidades familiares y niños migrantes.
Como un apoyo a las mujeres de Honduras, García de Hernández resaltó la creación del programa Ciudad Mujer, un lugar de oportunidades para las hondureñas; actualmente funcionan dos centros, en los cuales se brinda atención integral a las damas y se construyen otros tres en San Pedro Sula, Juticalpa y La Ceiba.
Explicó que dichas medidas permiten garantizar una atención de calidad a los connacionales que son retornados al país.
Finalizó expresando que Honduras, en apoyo a la implementación de la Agenda 2030 y para “no dejar a nadie atrás”, sigue trabajando en la protección de los migrantes y en la transformación de la calidad de vida de las mujeres, las niñas y las adolescentes.
En el evento participaron dignatarios de alto nivel, ministros, funcionarios de las Naciones Unidas y otras instituciones interesadas para analizar los abusos y violaciones de los derechos de mujeres y niñas durante los flujos migratorios.
Además
Con este panel se pretende discutir la complejidad de las tendencias migratorias contemporáneas. También se revisaron las oportunidades que existen para potenciar la promoción de los derechos de las mujeres y niñas que migran y de mejorar los mecanismos de protección.