Como buena apasionada del deporte, la actriz Salma Hayek está siguiendo atentamente este verano las Olimpiadas de Río de Janeiro para apoyar a todos los atletas mexicanos y, en especial, a su prima Yvonne Treviño Hayek, que la próxima semana competirá en las pruebas de atletismo que se celebrarán en el estadio olímpico de la ciudad brasileña.
Aunque la estrella de cine aún no ha tenido la oportunidad de conocer en persona a Yvonne, ya ha dejado claro que no podría sentirse más orgullosa de compartir apellido con ella. Su parentesco es lejano, el abuelo de la atleta es primo del padre de Salma Hayek.
Las Olimpiadas siempre suponen un momento conflictivo para Salma al obligarle a elegir entre tres países que ocupan un lugar muy especial en su corazón: México -su país natal-, Francia -país de su marido- y Estados Unidos, donde ha residido buena parte de su vida y del que su hija Valentina tiene la nacionalidad.
“Es difícil la verdad. Primero de todo, tengo que apoyar a México porque soy mexicana y porque los atletas de mi país no reciben tanto apoyo para entrenarse como los estadounidenses, los franceses o los británicos tienen. Tiene mucho mérito que llevemos a tantos deportistas, porque para nosotros es mucho más duro. Somos muy buenos en tiro con arco, salto de trampolín, atletismo y fútbol”, reconocía Salma en el programa americano ‘Jimmy Kimmel Live’.